Doce años. Los padres de la pequeña Justina, con una foto de su hija, que falleció a los doce años a la espera de un trasplante de corazón.

El Senado argentino aprobó ayer y envió a la Cámara de Diputados el proyecto de reforma de la Ley de Trasplantes de Órganos, cuyo principal cambio es el de convertir a todos los ciudadanos mayores de 18 años en donantes de órganos, salvo que hubieran dejado su expresa negación.

La Cámara Alta aprobó la iniciativa impulsada tras la muerte de Justina Lo Cane, una nena de 12 años que murió en noviembre pasado a la espera de un trasplante de corazón. El proyecto, que busca aumentar la cantidad de donantes en el país, fue presentado por el senador de Cambiemos Juan Carlos Marino y los padres de la niña.

Después de haberse discutido en una Comisión de Salud el pasado martes y de su paso ayer por la Cámara Alta -justo en el Día Nacional del Donante de Órganos-, donde obtuvo respaldo por unanimidad, la reforma debe acudir a la Cámara Baja para obtener la aprobación definitiva.

El titular de la Comisión de Salud, Jorge Fiad, senador de la Unión Cívica Radical, dijo que la norma incorporará "una declaración de equidad de principios como el respeto por la dignidad, la autonomía, la autosuficiencia, la información y el trato igualitario".

La reforma dará prioridad al traslado de los pacientes y otorgará un régimen de capacitación permanente para el personal médico, programa que contará con un 20 por ciento del presupuesto del Fondo Nacional de Trasplantes.

En cuanto a otras novedades, las células se convertirán en objeto de trasplante, así como la operación renal cruzada. Además, se creará un Registro de No Donantes, mediante el cual se examinará la documentación del fallecido para constatar si expresó su voluntad negativa en el Sistema Nacional de Información de Procuración y Trasplante de la República Argentina (SINTRA).

La iniciativa también impondrá la obligación a los profesionales médicos de notificar al Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai) los tratamientos de diálisis que le realicen a un paciente, o cuando le indiquen la realización de un trasplante.

Esta reforma se aceleró después de un caso que conmovió a Argentina, como fue la muerte de la niña de 12 años Justina Lo Cane, que padecía una dolencia cardíaca desde pocos meses después de su nacimiento y que falleció en 2017 al no encontrar donante.

"A partir del caso Justina, sabíamos que estábamos en deuda con un sector vulnerable de la sociedad. Es por eso que desde distintos ámbitos empezamos a trabajar en la actualización de una ley que se había quedado en el tiempo", explicó Fiad durante la sesión, a la que acudieron los padres de Lo Cane.

El proyecto está basado en las deficiencias o problemas del régimen actual, experimentado principalmente en el caso de Justina Lo Cane, la nena de 12 años que murió en noviembre pasado por no recibir a tiempo un corazón y que conmovió a todo el país con su labor de concientización pese a la edad que tenía.

"Con esta iniciativa, buscamos dar respuestas a las más de 11 mil personas que están esperando un trasplante en Argentina, y sobre todo generar una conciencia universal solidaria en la que todos decidamos libremente registrar nuestra voluntad de donantes", dijo Fiad.
 

Las complicaciones que debió enfrentar


Justina había ingresado en la lista de espera del Incucai luego de sufrir en julio último una descompensación producto de una cardiopatía que había adquirido al año y medio por un virus, tras una neumonitis.

En septiembre tuvo otra descompensación, más grave, y entró de urgencia a terapia intensiva de la Fundación Favaloro. Dos días después, cuando todos sus órganos se descompensaron, la nena debió ser conectada a un soporte cardíaco y respiratorio (ECMO) mientras aguardaba en emergencia nacional un corazón para el trasplante. Durante ese tiempo padeció más complicaciones, como una trombosis que obligó a amputarle los dedos del pie derecho. Y a pesar de las dificultades, siguió peleando por sobreponerse. El 19 de noviembre en el Facebook de La Campaña de Justina se posteó que su estado era "crítico, cada día que pasa le juega en contra". Tuvo más de 10 posibilidades de recibir un corazón durante su internación. Sin embargo, ninguno pudo concretarse.

Fuente: Efe