Excesos climáticos tales como las olas de calor, las sequías y las inundaciones hacen de 2009, especialmente en el Norte y Centro del país, el año de fenómenos extremos más frecuentes e intensos de las últimos 50 años, informó el Servicio Meteorológico (SMN).
El departamento sanjuanino de Jáchal, donde el martes pasado hubo temperaturas de 42,5 grados, es una de las tantas ciudades argentinas que superaron este año el valor máximo de 5 décadas.
El Departamento de Climatología del SMN puso como ejemplo que este año en Corrientes llovió, en lo que va del mes, unos 500 milímetros, más del doble de lo esperable para esta altura del año en ese lugar del país, mientras que Catamarca superó con 47 grados en octubre su récord de temperatura máxima absoluta desde 1963.
"Olas de calor, falta de lluvias y fuertes y recurrentes tormentas convirtieron claramente a 2009 en el año con más frecuentes e intensos fenómenos extremos, desde 1961", dijo José Luis Stella, climatólogo del SMN.
El informe que publica el SMN en su página web explica además que esa recurrencia e intensidad de los fenómenos extremos (que siempre acontecen) son las que marcan la diferencia respecto de otros años.
"Cabe destacar que Catamarca, que tuvo su máxima marca de 45,7 grados centígrados el 4 de enero de 1963; Santiago del Estero, que tocó los 45,2 grados el 12 de diciembre de 1988, y Tucumán, con un tope de 43,5 grados el 20 de diciembre de 1995 superaron este año sus propios récords", precisó Stella.
En tanto, otras localidades como Jáchal, Venado Tuerto, Marcos Juárez, Paraná, Bolívar, Paso de los Libres, Nueve de Julio, Rosario, Junín, Monte Caseros, Concordia, Gualeguaychú, San Rafael, Bahía Blanca, Buenos Aires, Azul, Las Flores, Tres Arroyos y Tandil superaron el valor máximo de cinco décadas.
"Tanto la sequía como las altas temperaturas registradas durante este otoño y el comienzo de la primavera provocaron una crisis climática en el norte y centro del país", dijo el experto.
Aunque el Litoral ya se recuperó casi totalmente de la sequía, se advierte que las precipitaciones que se registran ahora pueden continuar con efectos totalmente opuestos.
También Córdoba y Santa Fe se recuperan lentamente de la falta de agua, que castigó como nunca a estas provincias. Sin embargo, el sudoeste de Buenos Aires y el sur de La Pampa siguen sufriendo la sequía.
"La falta de lluvia en el verano y el otoño sumada a que tampoco llovió durante los primeros días de la primavera hicieron de este año un período totalmente atípico", sostuvo Stella.
Para el técnico del SMN, "el calor no sólo fue intenso sino que se registró frecuentemente, lo que provocó una crisis muy importante".
La sequía que afectó Entre Ríos, Santa Fe y Misiones el año pasado, en 2009 continuó y aunque tendió a recuperarse, se corrió hacia San Luis y el oeste de Córdoba.
Según Stella, tanto el fenómeno de El Niño como el de La Niña, condicionan el clima del país y de la región. "Gracias a El Niño tuvimos un año muy seco y La Niña que es la que trae las lluvias nos afectó con precipitaciones inferiores a lo normal", explicó el meteorólogo. El Niño dura hasta el comienzo del otoño y ocurre por el calentamiento de las aguas del Pacifico Central.
"Pehuajó con 40 grados en octubre fue récord de los últimos 50 años, ya que la máxima registrada en esa localidad alcanzó 34,7 grados centígrados, el 31 de octubre de 1962", afirmó el difusor.