La Cámara de Senadores avaló el pliego del sanjuanino Dalmiro Garay, el funcionario de Alfredo Cornejo que de esta manera, se convirtió en ministro de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza. Tuvo 28 votos a favor y solamente 9 en contra.

El Gobernador de la vecina provincia fue quien le ofreció al titular del ministerio de Gobierno, Justicia y Trabajo, el puesto que dejó Alejandro Pérez Hualde, quien se jubiló y este es su último mes de trabajo. La semana pasada, en la audiencia pública que se realizó en el Salón Rojas, Garay pasó sin sobresaltos los cuestionamientos de parte de la oposición. Además cosechó más de 1800 adhesiones, y solo 19 impugnaciones.

Entre las adhesiones, la mayoría provino sectores ligados a la Justicia, como colegios de abogados, notariales y representantes de universidades.

En tanto que de las impugnaciones, las más notorias provinieron de sectores sindicales, fundamentalmente referenciados con la oposición política a Garay, quien ha prometido desafiliarse de la UCR si es nombrado en la Suprema Corte.

Se espera que el abogado de 45 años, magíster en derecho administrativo en economía, tome su puesto de manera efectiva el próximo 2 de julio. Sin embargo, Garay aclaró que lo hará cuando Cornejo firme el decreto.

Su perfil

El oriundo de Jáchal es magíster en Derecho Administrativo y sin cargos de primera línea en el pasado hasta que con la actual gestión se convirtió en Ministro de Gobierno. Es además el principal apoyo político del Gobernador y es el ideólogo de otras varias iniciativas cornejistas, como el diseño del formato actual de las paritarias o buena parte de la reforma judicial que este Gobierno encara, por citar algunas, como el ítem aula.

Es cultor del bajo perfil y se considera más “cerebral” que apasionado y con Cornejo tienen una confianza absoluta.

Fuente: Los Andes