El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro , vendrá a la Argentina el 6 de junio, confirmaron fuentes oficiales. Se espera que el mandatario traiga una nutrida agenda de trabajo bilateral, además de adelantar algunos de los temas de discusión que probablemente se amplíen luego en la cumbre del Mercosur, que tendrá lugar en julio.

El Palacio de Itamaraty confirmó hoy la fecha del viaje de Bolsonaro a Buenos Aires con un comunicado en el que resaltó que la visita "exhibe la prioridad atribuida por Brasil al relacionamiento con la Argentina". "Posibilitará que los dos presidentes confirmen el necesario impulso político a temas prioritarios de la relación bilateral" además de ser una oportunidad "para discutir temas de interés común de la agenda internacional en el actual escenario de integración regional".

Desde su asunción, el 1º de enero, Bolsonaro ya visitó a Chile, a Israel y a los Estados Unidos. Rompió así con la tradición diplomática de los mandatarios brasileños, que suelen elegir a la Argentina como primer destino internacional.

Mauricio Macri, sin embargo, fue el primer presidente que Bolsonaro recibió en Brasilia, quince días después de su asunción. Ambos mandatarios mostraron buena sintonía al punto que el mandatario argentino resaltó que encontró en su par "muchísimas coincidencias". Por su parte, Bolsonaro subrayó en este entonces que las "reformas económicas que Brasil y la Argentina estaban llevando adelante son fundamentales para el crecimiento sostenible", Macri apuntó que ambos fueron elegidos porque sus sociedades "querían un cambio de verdad".

La visita de Bolsonaro se dará así antes de la 54º cumbre del Mercosur, que tendrá lugar entre el entre el 1° y el 10 de julio la ciudad de Santa Fe. Los gobiernos de Brasil y la Argentina coinciden en que hay que abrir el Mercosur a otros mercados, hacer que el bloque funcione más eficientemente y con menos trabas comerciales y rebajar el Arancel Externo Común (AEC) -una medida que implicaría una apertura de importaciones, con un potencial impacto en la industria- aunque aún no se pusieron de acuerdo en los plazos.

Otro tema ineludible es el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea. En su visita al G20, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, una de las voces clave en la negociación, había señalado que el acuerdo entre los bloques estaba sujeto a la política que tomara el presidente entrante de Brasil. Pasados más de tres meses desde su asunción, el canciller de Brasil, Ernesto Araujo, manifestó en una entrevista con LA NACION que "nunca estuvimos tan cerca de un acuerdo que puede ser excelente para nuestras economías".

Se espera, en tanto, que Bolsonaro traiga una nutrida agenda de trabajo en materia de comercio bilateral, para liberalizar la exportación de determinados productos. Además, Brasil está interesado fomentar la cooperación para el combate al crimen organizado y en facilitar la interconexión física, dado que hay una preocupación por el corredor bioceánico que pasa por Brasil, Paraguay Argentina y Chile y que aún debe finalizarse.