Alrededor de veinte esqueletos humanos fueron encontrados en una playa de Chubut por vecinos que paseaban en cuatriciclos. Algunos de los huesos estaban en el interior de bolsas negras de basura rotas y otros esparcidos en la arena.

Hasta el momento las autoridades no han podido confirmar cuál es el verdadero origen de las osamentas. Organismos de derechos humanos de la provincia ya han dado la voz de alerta y plantean que podrían tratarse de los restos de prisioneros políticos asesinados en la última dictadura militar y enterrados en una fosa común. Otra posibilidad, indican, es que sean los esqueletos de mujeres víctimas de la trata en ciudades como Puerto Pirámides y Puerto Madryn, ambas conocidas por albergar prostíbulos clandestinos.

La policía de la provincia indicó que podría tratarse de osamentas de un cementerio indígena de unos 3.000 años de antigüedad. En los próximos días se harán presentes en el lugar del hallazgo, Punta Pardelas, a unos 30 kilómetros de Puerto Pirámides, un equipo de investigadores de la dirección de Áreas Protegidas y Pueblo Originarios, según informaron autoridades del Conicet-Cenpat.

Desde que aparecieron los esqueletos las versiones acerca de lo que pudo suceder con estas personas se han disparado en la zona atlántica de la Patagonia, informó el diario Clarín. En Whatsapp se transmitió un mensaje de voz de los supuestos descubridores donde estos se muestran reticentes a creer que pertenecen a restos aborígenes. También dicen que intentaron hacer la denuncia en una Comisaría de Pirámides pero que los policías se negaron a ir al sector para ver con sus propios ojos el descubrimiento.