Unos 30 mil directivos y docentes, además de 2.800 familias, participarán de una evaluación nacional sobre el sistema de educación a distancia que impuso la pandemia de coronavirus, de la cual surgirán sugerencias para la elaboración de los protocolos que permitan la vuelta a las clases presenciales.

La encuesta será organizada por el Ministerio de Educación de la Nación para generar evidencia sobre el impacto de la educación a distancia en los aprendizajes y cómo afecta a los escolarizados la desigualdad en el acceso a los sistemas o plataformas.

A través de los resultados de esta evaluación se buscará tener datos mas certeros para la elaboración de protocolos que permitan la vuelta a las clases presenciales, "con el consenso de los epidemiólogos", aseguró el ministro de educación Nicolás Trotta.

La evaluación, tanto en escuelas públicas como privadas, será vía telefónica en aquellos hogares que no tengan internet y online para los que la posean. Abarcará a 30.000 directivos y docentes de todo el país, mientras que también serán consultadas 2.800 familias sobre las actividades realizadas en casa durante el período de aislamiento.

El test se hará a lo largo de este mes y los primeros resultados se revelarán en julio, mientras que en octubre se dará un informe final.

"Queremos generar evidencias acerca de retomar las clases presenciales y el modo en el que serán reorganizadas las actividades educativas", dijo Gabriela Diker, secretaria de evaluación e Información Educativa. Explicó que "nos preocupa generar evidencia que nos permita estimar en cuanto se profundizó la brecha de la desigualdad".

La encuesta pretenderá relevar las condiciones de organización del trabajo docente en este tiempo de educación a distancia. También se evaluará la planificación de maestros, y se analizará la matrícula escolar que había antes del inicio del aislamiento y la que exista cuando se retorne a las aulas.

"Esto es para ver qué nivel de estrategias deberemos aplicar para el retorno de los alumnos que abandonaron la escuela", detalló Diker.

Trotta destacó que "debemos diseñar una estrategia de convocatoria y búsqueda individual para aquellos estudiantes que no se vayan a presentar en el aula". Para el ministro, "el alumno está condicionado por la falta de un hardware adecuado". Destacó la problemática de la desigualdad educativa y para conocerlos en profundidad "es que hacemos esta encuesta en la que sabremos qué obstáculos tenemos que remover para dar continuidad a las trayectorias escolares".

"Sabemos que cuando vuelvan las clases presenciales -acotó Trotta- tendremos aulas mucho más heterogéneas, lo que nos obligará a repensar muchos aspectos en relación al abordaje de los contenidos y cuáles de ellos vamos a dar este año y cuáles en el 2021".

La evaluación indagará en las prácticas pedagógicas desarrolladas, las decisiones didácticas que se tomaron, los canales de comunicación utilizados, el tipo de actividades más frecuentes y los materiales o recursos implementados. También se buscará conocer en qué escuelas continuaron activos los servicios de alimentación. Télam


"Reabsorbidos"


"No estamos diciendo que habrá una promoción automática, decimos que los contenidos de esta etapa serán evaluados sin nota numérica, con un carácter formativo, mientras que los contenidos prioritarios que no se alcancen a dar este año serán reabsorbidos en los ciclos escolares 2021 o 2022", destacó Diker.