El ministro de Economía, Axel Kicillof desplegó ayer ante la prensa una serie de definiciones alineadas con lo que expresó por horas antes el Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. Como el chaqueño habló de ‘variación de precios‘ y no de inflación, insistió en que el plan no tendrá ‘anuncios grandilocuentes‘ y que se trata de equilibrar las variables ‘monetarias, fiscales y cambiarias‘. En relación al dólar, esbozó que existen ‘campañas para sembrar incertidumbre‘ y aseguró que las reservas monetarias del Banco Central ‘son fuertes‘, aunque admitió que tuvieron ‘algunas rebajas‘. También reconoció que debe generarse una ‘mayor oferta de dólares‘.
El flamante ministro de Economía sostuvo que ‘aquel que mida la variable del tipo de cambio como una cuestión separada, se equivoca‘ y reiteró la importancia de ‘la consistencia entre lo fiscal, lo monetario y lo cambiario‘.
No obstante, no dio precisiones acerca de la continuidad del cepo cambiario o su eventual flexibilización, ni se refirió a las versiones sobre un posible desdoblamiento del mercado de cambios
También en línea con Capitanich abundó en detalles sobre los controles sobre las cadenas de valor y avanzó sobre la cuestión de los subsidios sobre las tarifas: ‘vamos a trabajar en la consistencia de los precios de los servicios‘, puntualizó.
Respecto de las principales preocupaciones del Gobierno, el jefe de la cartera económica indicó que ‘vamos a seguir con las metas que se focalizan en la producción, el empleo y la distribución de la riqueza‘. Por otra parte, y luego de destacar la caída en los niveles de desempleo, expresó que el Gobierno continuará ‘fomentando la industria nacional y el consumo interno, y para eso necesitamos que la gente siga consumiendo y que se siga generando el círculo virtuoso‘. Kicillof remarcó que con Capitanich conformaron ‘un equipo‘, que se conocen ‘muy bien‘ y que vienen ‘trabajando muy fuerte para llevar adelante el programa metas de Gobierno, con los objetivos que son el empleo, la producción, la distribución del ingreso‘.

