La presidenta Cristina Fernández de Kirchner sufrió ayer un nuevo cuadro de ‘hipotensión arterial leve‘, por lo que los médicos le recomendaron realizar reposo por 24 horas y reanudar sus actividades recién hoy.
La jefa de Estado ‘presentó un cuadro de hipotensión arterial leve, por lo cual se le indicó reposo por un día, y control evolutivo‘, informó el comunicado firmado por la Unidad Médica Presidencial. El escueto texto firmado por los doctores Luis Buonomo, Marcelo Ballesteros y Daniel Fernández fue distribuido ayer al mediodía a los periodistas acreditados en la Casa de Gobierno.
La de ayer no fue la primera indicación médica de reposo por alteraciones en su presión arterial que recibió la presidenta argentina. En los cinco años que lleva al frente del Ejecutivo, Cristina debió guardar reposo en otras oportunidades por cuadros de hipotensión (presión arterial baja) y lipotimia (desmayo con pérdida parcial del conocimiento ocasionado, entre otras cosas, por fatiga, estrés, golpes de calor e hipotensión).
Fernández padeció varios episodios similares, registrándose el último el 22 de agosto pasado, cuando debió suspender una visita a Jujuy, donde se la esperaba para recordar los 200 años del Éxodo, durante la gesta de la Independencia. En aquella ocasión, la mandataria argentina ‘presentó un episodio de lipotimia, por lo que se recomendó suspensión de actividades laborales y reposo’, según señalaba el parte de aquel entonces.
La mandataria, que fue intervenida por un supuesto carcinoma de la glándula tiroides el pasado 4 de enero, sufrió el año pasado tres episodios de hipotensión: el 25 de enero, el 14 de abril y el 11 de octubre, y había sufrido otro el 9 de enero de 2009.
También, el 25 de octubre de 2010, le fue indicado descanso por dos días por una gripe viral, con anginas y dolores articulares, pese a que meses antes se había aplicado la vacuna antiviral.
Mientras que en el mes de enero de 2009 pasó casi una semana de reposo por decisión del médico presidencial tras sufrir un cuadro de hipotensión.
Sin embargo, su afección más severa fue la operación por extracción de la glándula tiroidea a la que fue el año pasado y que la tuvo alejada de la actividad oficial durante 20 días. En principio se informó que se trataba de un cáncer, pero luego se confirmó que se trataba de algo benigno.
En cuanto a su agenda pendiente, el lunes pasado se suspendió el acto de entrega del DNI número veinte millones, previsto en la Casa de Gobierno, aunque la jefa de Estado recibió por la tarde en Olivos a los ministros de Planificación, Julio de Vido, y de Economía, Hernán Lorenzino, y a los secretarios de Política Económica, Axel Kicillof, y de Obras Públicas, José López. También se había postergado para hoy el acto en General Rodríguez, donde la Presidenta tenía previsto entregar viviendas.
La primera mandataria había regresado a Olivos el domingo por la noche de Río Gallegos, en donde recordó el sábado, junto a sus hijos, el segundo aniversario del fallecimiento de su esposo y antecesor, Néstor Kirchner.

