La fiscal Viviana Fein, al frente de la investigación por la muerte en extrañas circunstancias de su colega Alberto Nisman, admitió ayer que ‘son totales las diferencias‘ entre las pericias oficiales y las del equipo contratado por la querella que dio a conocer hace días la exmujer de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado.
Por ese motivo, Fein reiteró la necesidad de ‘zanjar diferencias‘ mediante la convocatoria de una junta médica. Los dos grupos de expertos disienten sobre la hora de la muerte: para los peritos oficiales ocurrió el domingo 18 de enero al mediodía mientras que los peritos de parte adelantan el deceso fue el sábado en la tarde-noche.
Sin embargo, de acuerdo a un peritaje informático Nisman usó su ordenador la mañana del domingo. Ese peritaje se mantiene inconcluso por ‘un pedido de la querella‘, indicó Fein, en referencia a la solicitud de Arroyo Salgado para ‘preservar la confidencialidad de todo lo que pueda surgir de los aparatos electrónicos‘.
En declaraciones radiales, Fein insistió en que las ‘tremendas‘ diferencias entre las pericias oficiales y las que presentó la querella, encabezada por la ex de Nisman, se van a zanjar ‘en una junta médica, una nueva pericia, donde deben participar los peritos oficiales y los de parte, para ver si se ponen de acuerdo‘.
La funcionaria judicial aseguró que ‘se puede llegar a descubrir la verdad, pero hay que esperar las pericias de comunicaciones, de los teléfonos y de las computadoras‘.
Y, precisó que ‘cuando comienza esta pericia, al segundo o tercer día, llega un escrito pidiendo que se modifique ese acto de pericia‘ y remató: ‘lo digo aunque moleste las partes, pidió preservar la confidencialidad de todo lo que pueda surgir de los aparatos telefónicos y de las computadoras‘.
‘Para qué tuvimos que perder un mes o más para armar los puntos de pericias que pidió Arroyo Salgado…‘, se preguntó la fiscal y también sostuvo que la ex de Nisman ‘pidió que se haga la pericia de una forma y dos días después (de comenzarla) la frenó‘. Fein remarcó que ‘jamás‘ descartó que se tratara de un asesinato ya que siempre habló de ‘muerte dudosa‘.