El chofer que conducía el ómnibus en el que murieron 12 personas, entre ellas 9 alumnos y una docente del colegio Ecos de Capital Federal, fue absuelto ayer por la justicia penal de Santa Fe al considerar que no violó "el deber de cuidado de sus pasajeros". Oscar Atamañuk era el único imputado en la causa "por homicidio y lesiones múltiples en concurso ideal", pero el juez de instrucción penal de Reconquista, Jorge Galbusera, no encontró pruebas suficientes para culparlo del accidente ocurrido en octubre de 2006, cuando el micro regresaba de un viaje solidario en un pueblo rural de Chaco. El magistrado entendió que "el único responsable" de la tragedia fue el conductor del camión, que según las pericias posteriores embistió en estado de ebriedad al ómnibus, y que falleció junto a su acompañante.
