Los principales referentes de Juntos por el Cambio se reunieron de manera virtual y rechazaron duramente el proyecto que presentará el Gobierno para regular las restricciones en el marco de la pandemia.

Entre los presentes estuvieron el expresidente Mauricio Macri; el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el titular de la UCR, Alfredo Cornejo; la presidenta del PRO, Patricia Bullirch; el jefe de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro; los senadores Luis Naidenoff y Martín Lousteau; y los diputados Cristian Ritondo, Mario Negri y Juan Manuel López.

La reunión se centró en el proyecto que este lunes tiene previsto presentar el oficialismo en el Congreso para establecer los criterios científicos que regularán las restricciones futuras.

El Frente de Todos quiere un rápido tratamiento en el Parlamento y ya comenzó las negociaciones con los bloques opositores más pequeños, mientras que Juntos por el Cambio anticipó su rechazo y advirtió que el texto podría contener “superpoderes”.

“La estrategia sanitaria del Gobierno falló a pesar de tener el poder necesario. No le vamos a otorgar más poder a @alferdez. Lo que sí necesita es una gestión clara consiguiendo las vacunas para todos los argentinos”, afirmó Cornejo en su cuenta de la red social Twitter, ya recuperado tras haber estado internado por coronavirus.

Se espera que el bloque realice la próxima semana preparan una reunión presencial entre sus principales líderes para acomodar la estrategia que adoptarán frente al tratamiento de este proyecto.

La iniciativa de Fernández promueve la estandarización de los escenarios epidemiológicos, además de las facultades del mandatario y los gobernadores para disponer “medidas de cuidado de la población” por la segunda ola de contagios de coronavirus. Antes de partir hacia Europa el Presidente firmó la propuesta, que tiene características similares a los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) de restricciones.

El Gobierno apunta a que la iniciativa se apruebe antes del 21 de mayo, cuando vence el actual DNU de limitaciones por la pandemia. Contempla un “semáforo epidemiológico” que determina los indicadores a partir de los que las jurisdicciones estarán facultadas y aconsejadas a disponer cierres. Entre ellos la suspensión de clases presenciales, medida que no acompañó la ciudad de Buenos Aires y que apeló ante el máximo tribunal, que le dio luz verde a la actividad en las escuelas.

Fuente: TN