El cuerpo de una beba recién nacida que había sido denunciada como robada de un hospital de Unquillo, Córdoba, fue hallado en las últimas horas en la casa de su madre, Dayana Gorosito, de 21 años. La joven había sido detenida días atrás junto a su pareja ante la sospecha de que había realizado una falsa denuncia tras deshacerse de la beba.

Fuentes policiales informaron que el cuerpo fue encontrado en una bolsa adentro del placard de la humilde casa de Dayana en el marco de un operativo. A raíz del hallazgo de algunas hojas secas y tierra en la bolsa, los investigadores creen que la mujer tuvo el parto entre los yuyos.

Tanto Dayana, que había denunciado el supuesto robo de su beba recién nacida en un hospital de Córdoba, como su novio Luis Orona fueron detenidos, acusados de homicidio. El cadáver fue encontrado oculto en una bolsa entre los juguetes de su hijo mayor.

El cadáver fue encontrado el domingo pasado por la noche por familiares de Gorosito ‘en el dormitorio‘ del hijo mayor de la joven en su casa del barrio Gobernador Pizarro, en la localidad de Unquillo, dentro de una bolsa de nailon y bajo una pila de juguetes del niño.

La Justicia dispuso el traslado del cuerpo para ser sometido a la autopsia, mediante la cual se establecerá la causa de la muerte y se corroborará que sea hija de Gorosito y su pareja. La mujer está detenida desde el 24 de mayo pasado, cuando la Justicia le imputó el delito de homicidio, a pesar de que el cuerpo de la beba no había sido hallado.

Al momento de ser acusada, Gorosito estaba internada en un hospital, por algunas afecciones derivadas del parto. Tras su imputación, la Justicia dispuso que se le asignara en ese centro de salud una custodia policial, de la que logró zafar y huir el 25 de mayo. No obstante, fue detenida horas después en su casa y luego alojada en el penal de Bouwer.

La mujer había denunciado que el 21 de mayo había ingresado en trabajo de parto al hospital Urrutia de Unquillo y que luego de parir una beba le informaron que había nacido muerta y le mostraron un cuerpo que nunca le entregaron, razón por el cual denunció el robo. Las autoridades del hospital negaron el hecho. Cuatro días después de la denuncia, la fiscal Mercedes Ballestrini imputó a Gorosito por homicidio, ya que contaba con elementos para suponer que se había hecho un aborto.