Los restos de la adolescente Horacelia Génesis Marasca, cuya desaparición había sido denunciada hace diez días, fueron hallados separados en cuatro bolsas en la zona Oeste de la ciudad de Posadas tras la confesión que hizo su novio, que se encuentra detenido.
Fuentes policiales confirmaron ayer que los restos de la adolescente de 16 años se encontraban en bolsas de consorcio ocultas en distintos sitios tal como había revelado a la Justicia la pareja de la víctima, Martín Monzón, de 34 años. Ambos son padres de una beba de siete meses.
El cadáver de Horacelia era buscado por las autoridades luego de que su pareja, Monzón, confesara, ante la Policía inicialmente y al juez que interviene en la causa, que la había asesinado durante una discusión en su casa, en el barrio posadeño de Villa Cabello, Misiones.
En una primera exposición ante la Policía, Monzón había manifestado que no sabía nada del paradero de su concubina, pero llamó la atención tanto de su familia como de las autoridades que la joven se hubiera ausentado sin llevar consigo dinero, ropas, ni a la beba que tenían en común.
Finalmente, el jueves de esta semana el juez de instrucción Ricardo Balor dispuso la detención de Monzón por la desaparición de Horacelia, y el hombre, quien tenía antecedentes por violencia de género, se quebró y confesó cómo la había matado. Monzón declaró que tras una pelea ocurrida el mismo día de su desaparición, la apuñaló varias veces, la descuartizó y utilizó el carrito del bebé para sacar sus restos en bolsas en varios viajes.
El juez analizaba agravar la imputación al detenido como autor material de femicidio. Monzón se encuentra detenido desde la última semana sospechado de ser al autor del crimen. El cadáver fue localizado dentro de cuatro bolsas en una amplia zona del Oeste de Posadas.
Los efectivos policiales lograron dar con los restos siguiendo las revelaciones de Monzón. Con la descripción acerca de los puntos donde había diseminado los restos, los investigadores realizaron un rastrillaje que permitió ubicar dos bolsas en cercanías de la vivienda que ocupaban, en populoso asentamiento conocido como Villa Cabello. Otras dos bolsas fueron localizadas cerca de una tubería que desagua en la confluencia del arroyo Mártires y el río Paraná, hasta donde habría llegado el sospechoso utilizando el carrito de la beba de siete meses de la pareja. Marasca se encontraba desaparecida desde el 17 de agosto y Monzón fue el que denunció que la adolescente había abandonado la casa que compartían. En su denuncia, el hombre expresó que Marasca había adoptado la decisión de alejarse de la casa sin dar razones, dejando a la bebé a cargo de Monzón, lo que también despertó la preocupación de Norma Benítez, madre de la joven.
La mujer reveló que recibió varios mensajes de su hija quien relató las dificultades por las que atravesaba a raíz de las agresiones físicas, insultos y amenazas de su pareja. Con los datos obtenidos, Balor dispuso el allanamiento de la vivienda que la pareja compartía junto al bebé. El miércoles, en una de las requisas, los investigadores hallaron un par de zapatillas con marchas de sangre, razón por la que dispuso la detención de Monzón.