La jueza de Nueva York (EEUU) Loretta Preska ordenó ayer postergar los plazos del multimillonario juicio de Eton Park contra YPF hasta que se defina el próximo presidente de Argentina. Se trata del litigio internacional más importante que enfrenta el país y que podría poner en juego hasta 5 mil millones de dólares, según cálculos del Gobierno.

Argentina enfrenta un reclamo de los fondos especulativos Eton Park y Burford Capital, que se quedaron con el derecho a litigar del Grupo Petersen por la estatización de YPF del año 2012. Las firmas Petersen Energía y Petersen Energía Inversora tenían el 25% de YPF cuando la controlante era Repsol. En 2012, la estatización impulsada por el gobierno de Cristina Kirchner expropió el 51% de las acciones Clase D de la compañía, pertenecientes a Repsol, pagándole la correspondiente compensación.

Petersen terminó yendo a la quiebra, con el argumento de que no podían cubrir deudas. Así apareció el fondo Burford, un especialista en litigios de empresas concursadas o en bancarrota, para comprar el derecho a litigar de Petersen y convertirse en demandante del Estado argentino. En 2015, Burford inició una demanda en la Corte de Nueva York alegando un incumplimiento del estatuto de YPF al realizarse la expropiación. Luego el fondo Eton se sumó a la demanda. Argentina e YPF habían presentado un escrito el 30 de agosto pasado en el que pedían, con varios fundamentos jurídicos, que el juicio de YPF se tramite en jurisdicción argentina y no en Nueva York.

En el proceso, se esperaba que el 30 de octubre, tres días después de las elecciones, los fondos que tienen la demanda contestaran al recurso de excepción que presentó la Argentina para mudar el juicio. Sin embargo, la jueza definió ayer cambiar los plazos: dijo que Eton tiene tiempo para presentar su respuesta hasta el 7 de diciembre y que el Estado argentino puede responder, a su vez, hasta el 7 de enero del 2020.