Mauricio Macri, de camisa celeste arremangada y jean azul, estuvo acompañado durante la despedida de hoy, en todo momento, por su esposa, Juliana Awada, que lucía un vestido largo color violeta con incrustaciones plateadas, y el senador peronista y excandidato a vicepresidente Miguel Ángel Pichetto, vestido con un ambo azul y camisa celeste.

Los tres se asomaron al balcón de la Casa Rosada cerca de las 18.45. Tras unos breves saludos, donde hubo ovaciones a Macri y a Pichetto (a quien el primer mandatario le alzó el brazo izquierdo) y la entonación del Himno Nacional, los tres descendieron por las escaleras a la calle y se dirigieron al escenario desde el cual el jefe de Estado habló unos diez minutos.


Tras iniciar su mensaje con un "buenas tardes, argentinos" y varios "gracias de corazón", Macri sostuvo: "Me guardo tantas cosas que hemos vivido juntos que me va explotar este corazón, que es más de ustedes que mío".

Agradeció, además por "acompañar estos cuatro años de transformaciones poniendo todo" e hizo "una mención especial a las mujeres que, se movilizaron de manera impresionante en estos cuatro años".

Durante las palabras de Mauricio Macri, en más de una oportunidad, se vio a Juliana Awada emocionada hasta las lágrimas.