Enrique Balbi, vocero de la Armada, aseguró que “no hay indicios” de que el submarino ARA San Juan “se haya hundido” y pidió paciencia mientras llevan adelante su búsqueda, tras haber perdido contacto desde el miércoles pasado.

 

“Con el procedimiento de búsqueda que se inició ayer a las 22 todavía no alcanzamos a barrer la totalidad del área, que es muy importante y está a unos 430 kilómetros de la costa; recién va un 15 o 20 por ciento del área”, precisó Balbi.

 

Dos de los 44 tripulantes son sanjuaninos.

 

El vocero ratificó que en la Armada están convencidos de que el submarino no se hundió y explicó en dónde lo están buscando. “Sabemos que tuvo problemas en las comunicaciones, pero no sabemos si tiene propulsión ni qué tan grave es la avería. Eso implica que hay dos posiciones estimadas en las que buscar. Si la falla es sólo en la comunicación, tuvo que seguir la ruta directa a Mar del Plata para favorecer el encuentro. Si en cambio no tiene propulsión y está a la deriva, hay que buscar teniendo en cuenta los vientos y las corrientes”, precisó.

 

Balbi adelantó que las condiciones de búsqueda no son las mejores. “Hay viento muy fuerte y se prevé un temporal para hoy, con vientos de unos 90 kilómetros por hora, lo que va dificultar las operaciones”, indicó.

 

El Comando Naval de Tránsito Marino activó este viernes un operativo de búsqueda y rescate del submarino “ARA San Juan”, con el que se perdió comunicación desde el último miércoles. Las primeras informaciones indicaban que se había generado un corte de energía que causó un incendio en el banco de baterías del navío, pero esto fue desmentido por la Armada Argentina.

 

El submarino, que operaba a la altura de Puerto Madryn, lleva una tripulación de 44 marineros, entre oficiales y suboficiales, y se encontraba viajando desde la Base Naval Ushuaia a su apostadero habitual de la Base Naval Mar del Plata.

 

Para el operativo de rescate se asignaron dos naves de superficie equipadas con “sonar”(técnica que se vale de la propagación del sonido debajo del agua para detectar el rebote de las ondas en otros buques), y dos aviones que sobrevuelan la zona en la que se perdió el contacto.

 

El submarino estaba operando junto a otras unidades de la flota de mar, en tareas de control de la zona económica exclusiva.

 

¿Y LA COMIDA?

En ese sentido Balbi aseguró que los tripulantes no corren peligro en cuanto al suministro de alimentos, agua potable y oxígeno. Por caso, explicó que por protocolo los submarinos llevan alimentos suficientes para 15 días extra a los que demandará el viaje que están por emprender. Es decir que si tienen planeado navegar durante, por ejemplo, 10 días el submarino es cargado con alimentos suficientes para 25.

 

“De por sí el submarino lleva víveres mínimo para 15 días más de los estipulados de viaje. Se carga tanto con alimentos frescos, conservas y alimentos deshidratados. No hay acá un tema para preocuparse de supervivencia por cuestiones agua, comida o aire” explicó.

 

Aunque matizó que, en caso de que la nave haya sufrido un problema eléctrico es posible que los alimentos frescos se echen a perder con el correr de los días.