La Justicia de Entre Ríos tiene tiempo hasta el lunes para definir si desaloja o no el campo de la familia Etchevehere en Santa Elena. Allí se encuentran un grupo de personas ligadas al dirigente Juan Grabois que fueron autorizadas a ingresar por Dolores Etchevehere para realizar un proyecto agroecológico. Su familia asegura que se trata de una usurpación.

El escribano José Luis Zuffiaurre, que labró el documento, habló con TN y aseguró que se trata de “una nota firmada por Dolores de manera personal" y que fue correctamente certificada. “Comunica que le cede el total del paquete accionario a una sociedad anónima de Buenos Aires”, agregó. “Ella firmó, además, el libro de registro de la firma”, aseguró.

Esta es la cuestión central a resolver. Si el magistrado determina que los hermanos Etchevehere están en lo cierto y la documentación avala sus dichos se tratará de una usurpación de terrenos y podría disponer el desalojo de la propiedad.

En el lugar aún permanecen efectivos de la Policía de Entre Ríos para evitar que se produzca un choque cuerpo a cuerpo entre las personas ligadas a Grabois y los productores rurales que apoyan a Luis Etchevehere.

La trama

El conflicto se originó en septiembre de 2009, con la muerte de Luis Félix Etchevehere, el esposo de Leonor y padre de los cuatro hermanos: Luis Miguel, Juan Diego, Arturo Sebastián y Dolores. En diálogo con TN, esta última aseguró que se sintió “estafada” en la sucesión. La mujer recibió parte de la herencia: dinero, propiedades y campos, pero asegura que no es suficiente e inició acciones legales.

La Justicia intenta determinar si efectivamente Dolores firmó en 2018 ante el escribano José Luis Zuffiaurre la cesión de sus acciones a la sociedad anónima Mirus, para cancelar un préstamo de casi 370 mil dólares que había solicitado.

El escribano aseguró a TN.com.ar que tiene “la firma de Dolores Etchevehere registrada en varias Actas Protocolares y Escrituras Públicas que ella personalmente firmó en mi presencia”. Pero tiempo después la mujer se presentó en la propiedad junto con un grupo de personas.

Proyecto Artigas y Juan Grabois

Desde el inicio de la contienda jurídica, en 2010, Dolores tuvo dos abogados. Desde este 15 de octubre, el dirigente social Juan Grabois se calzó el traje para representarla en la Justicia. Ese mismo día, la heredera y el dirigente social anunciaron la fundación de Proyecto Artigas y la donación del 40% de las tierras de Casa Nueva para desarrollar proyectos de “emprendedurismo y agroecología”.

Con los papeles en mano, los Etchevehere insisten en que la mujer ya no tiene derechos sobre la tierra. Pero no pueden ingresar al predio que permanece bajo custodia policial y rodeado por ruralistas en contra de la posible toma. Deben esperar la definición del juez subrogante Raúl Flores.

En su sitio web, “Proyecto Artigas” se presenta como “una red integrada por movimientos sociales, profesionales del derecho, la comunicación y el cuidado del ambiente que, movilizados por la búsqueda de la verdad, la justicia y el bien común, actuamos conjuntamente en aquellas causas donde se vulneran los derechos de la Tierra”.

Según el grupo, se abocan a “causas que han sido ignoradas, cajoneadas y/o boicoteadas por las propias instituciones de la República, corrompidas por los privilegios de quienes usan el poder en su provecho, en un sistema estructuralmente perverso”.