Denuncia. "Él apareció muerto, lo asesinaron. Es una desaparición forzada", sostuvo Sergio Maldonado en la conferencia de prensa en la sede de Amnistía Internacional junto a la abogada de la familia, Verónica Heredia.

La familia de Santiago Maldonado volvió a la cargar ayer contra el Estado nacional al renovar su reclamo con el agregado de un agravante: ahora exigen que el caso sea investigado bajo la hipótesis de "desaparición forzada seguida de muerte". El argumento que sostiene esta denuncia es que el joven artesano no desapareció "cuando caminaba al lado del río, sino en el contexto de la represión de Gendarmería" a mapuches del Pu Lof en Resistencia Cushamen en Chubut, el 1 de agosto último. En este contexto, convocaron a una nueva marcha a Plaza de Mayo, y en todo el país, para pedir justicia por Santiago. Será el miércoles 1 de noviembre a las 18 horas, ese día se cumplirán tres meses del día en que desapareció el joven artesano de 28 años.

Sergio Maldonado, el hermano de Santiago, dijo que al joven "lo asesinaron", advirtió que fue víctima de "desaparición forzada" y cuestionó que los peritos "opinen cuando no están todas las pruebas" sobre la muerte, mientras la abogada aseguró que el cuerpo "no estaba" en el lugar del río Chubut donde finalmente fue hallado.



Antes de ser encontrado en un tramo del río Chubut, el pasado 17 de octubre, "el cuerpo no estaba ahí", un lugar "varias veces rastrillado", sostuvo Verónica Heredia, la abogada de la familia, que brindó ayer una conferencia de prensa junto a Sergio Maldonado y su esposa Andrea Antico, en la sede de Amnistía Internacional Argentina (AI), en Buenos Aires.

Sergio dijo no entender "por qué los peritos salen a opinar si no están todas la pruebas".

"Por eso es que insistimos en que un grupo de expertos independientes" sume su aporte a la investigación, encabezada por el juez federal Gustavo Lleral, para garantizar "imparcialidad", porque "lo que está en peligro es la investigación, conocer la verdad", subrayó la letrada. Además, Sergio denunció una campaña en redes sociales de hostigamiento hacia ellos, que se sumó a la hostilidad de "algunos periodistas y medios periodísticos" y a repetidos "seguimientos que nos hizo Gendarmería en El Bolsón, Esquel y Bariloche, de los que escuche los audios, no me lo contaron".

Por su parte, la directora ejecutiva de AI en la Argentina, Mariela Belski, señaló que esa organización de derechos humanos "acompaña a la familia Maldonado en un caso muy importante", por tratarse de "un delito muy grave" que involucra la actuación de Gendarmería y sobre el que se debe "investigar qué pasó".

Consultado sobre las declaraciones del juez Lleral después de concluir la autopsia cuando dijo que el cuerpo de Santiago no presentaba lesiones externas, Sergio se limitó a opinar que "tal vez fueron apresuradas, porque podría haber esperado al informe final". Ante la pregunta de si el cuerpo de Santiago fue "colocado" en el lugar en el que fue hallado a 78 días de su desaparición, Heredia dijo que el prefecto Leandro Ruata declaró el jueves en la causa que a comienzos de agosto en esa zona del río la profundidad era de 30 centímetros, cuando en el rastrillaje del 19 de septiembre era cercana a un metro y el 17 de octubre último, de 1,30 metros.

"No decimos que fue colocado, decimos que no estaba ahí y que todo esto debe ser comprobado. Podemos afirmar lo que dijeron Ruata y dos buzos, también lo que nosotros vimos y es que ahí no estaba", insistió.

Preguntados sobre la responsabilidad que atribuyen a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y a su jefe de gabinete, Pablo Noceti, Heredia respondió que podrá establecerse "qué responsabilidad les cabe en la medida en que avance la investigación".