Con toda la liturgia peronista y reeditando las mejores herramientas de convocatoria de las que hizo gala el kirchnerismo durante los gobierno de Néstor y Cristina Kirchner, el Frente de Todos intentará plasmar el viernes su mayor concentración desde la llegada de Alberto al poder en la marcha del 10 D.

Por ahora se sabe que el epicentro de esta nueva concentración de apoyo al Presidente será otra vez la Plaza Mayo. La novedad radica en que no será una manifestación más si no que tendrá una impronta más popular de la mano de un "festival ciudadano" con el que el Gobierno celebrará 38 años de democracia y dos de la asunción de Alberto.

La otra nota destacada de la manisfestación es que contará con la presencia del expresidente de Brasil, Lula Da Silva, que sería uno de los oradores, además de Alberto y Cristina.

Hay clima de fiesta en el Gobierno a pesar que ese mismo día el Presidente comenzará a transitar la segunda parte de su mandato con la asunción del nuevo Congreso surgido de las elecciones legislativas del 14 de noviembre que dejó al peronismo por primera vez desde el regreso de la democracia en 1983 sin mayoría propia en el Senado nacional y una relación de fuerzas más pareja en Diputados.

"No se tratará de un acto partidario sino de una convocatoria a toda la sociedad para celebrar la vigencia de la democracia en nuestro país", afirman en Casa de Gobierno. Por su parte, el jefe del bloque del FdT en la Cámara Baja, Máximo Kirchner, hizo una amplia convocatoria "a todo el pueblo argentino" a "reventar" la plaza.

El Presidente invitará a gobernadores, intendentes, referentes sindicales, miembros de la CGT y

organizaciones sociales para que se sumen al festejo luego de la multitudinaria marcha como la del 17 de noviembre por el Día de la Militancia, cuando la emblemática plaza lució colmada, pese al resultado adverso en las urnas de tres días antes en las elecciones legislativas de medio término.

Como ese día también se celebra el Día Internacional de los Derechos Humanos, Alberto entregará el premio Azucena Villaflor a la titular de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, y a una de las integrantes de las Madres de Plaza de Mayo, Tati Almeida, no a su presidente, Hebe de Bonafini, enfrentada con el Presidente.