Los bonos emitidos en dólares por las provincias, en especial los de Chaco, renovaron ayer las fuertes pérdidas en el mercado local, luego de que el gobernador Jorge Capitanich anunciara un canje para pesificar toda la deuda de su jurisdicción e instara a otros gobernadores a emitir en pesos.
La reacción negativa de los inversores al anuncio del mandatario chaqueño quedó reflejada en la cotización de los bonos de saneamiento garantizados de Chaco, que se desplomaron 26,05%, una tendencia a la baja que siguió la mayoría de la deuda provincial tras un recorte de nota de Moody’s.
Los bonos en dólares emitidos por Mendoza en 2004 con vencimiento en 2018 (BARX1) perdieron 6,7%, los Descuento Largo Plazo bonaerenses (BDED) cedieron 1,54% y los de Córdoba con vencimiento en 2013 (CO13) perdieron 0,8%, entre otros.
La poca disponibilidad de la divisa norteamericana de los estados provinciales para afrontar sus obligaciones está encendiendo alarmas en varias provincias habida cuenta que en Banco Central se negó a venderle los más de 263.651 dólares que Chaco quería comprar para cancelar los bonos CHSG 1 y 2.
Hoy tienen deudas en moneda extranjera Buenos Aires, la Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Chubut, Mendoza, Tucumán, Salta y Formosa. También una decena de municipios.
Ayer, todos los bonos de estos distritos recibieron otro golpe de gracia: La agencia de riesgo bajó hasta la categoría de grado especulativo o “bono basura” la calificación de los bonos emitidos en dólares en escala global por todas las provincias argentinas, y tomó la misma decisión para la deuda en moneda local de Chaco y Formosa. El declive de la deuda provincial comenzó luego de que Capitanich volvió a justificar la pesificación compulsiva de la deuda chaqueña, el último 3 de octubre, y anunció que hará “un canje de estos bonos en pesos”. “La verdad es que la deuda debe ser absolutamente pesificada”, sostuvo Capitanich y advirtió que “no puede existir una contradicción” con la desdolarización que intenta llevar adelante la Casa Rosada.
Los bonos de Chaco reaccionaron a la baja tras las declaraciones de Capitanich, mientras que la decisión de Moody’s terminó de sellar la suerte de los bonos provinciales. Moody’s bajó las calificaciones de emisor y de deuda -moneda local- de Chaco a “Caa3/Caa2.ar” desde “B3/A3.ar”, como resultado “del reciente incumplimiento en sus bonos denominados en dólares estadounidenses”, y tomó una decisión similar para la deuda emitida por Formosa.
Esta calificación está un escalón más abajo que la de la deuda de la Nación.
El temor de los inversores es que la pesificación se aplique también a los bonos del Gobierno nacional emitidos en dólares bajo ley local lo que en la práctica significaría una cesación de pagos generalizada. En total son diez títulos que representan una deuda de U$S 17.663 millones. Fuente: (DyN, diarios nacionales)
