El Gobierno argentino por ahora no reconocerá a Jeanine Áñez como presidenta provisional de Bolivia. Sólo la reconocerán como "autoridad del Senado", donde ocupaba el cargo de vicepresidenta segunda hasta que este martes fue proclamada como la sucesora interina de Evo Morales. De este modo, el presidente Macri muestra una diferencia con respecto a las manifestaciones públicas de sus pares de Estados Unidos y de Brasil.

"No vamos a pronunciarnos por el momento. Entendemos que es la máxima autoridad del Senado pero no hay elementos suficientes para reconocerla como presidenta, es algo que estamos estudiando", expresaron desde la Cancillería Argentina a Clarín.

Y agregaron, "los hechos se tienen que calmar, también la situación y convocar a elecciones", agregó la fuente oficial.

La crisis de Bolivia pasó a ocupar un lugar central en la agenda política de la Argentina. Ayer, previo a la asunción de Áñez como presidenta interina en una sesión del Congreso sin quórum que no contó con la presencia de los congresistas del MAS, Macri repudió la violencia en las calles del país vecino, evitó calificar el proceso como un “golpe de Estado" y pidió elecciones libres y justas.

Los gobiernos de Donald Trump y Jair Bolsonaro, en tanto, sí reconocieron la presidencia provisoria de Áñez. “La presidenta en funciones del Senado ha asumido las responsabilidades de presidenta interina de Bolivia”, declaró en las redes sociales el encargado de Latinoamérica en el Departamento de Estado, Michael Kozak.