Fue un hasta luego. Macri dijo "estamos acá más juntos que nunca, más comprometidos que nunca, sin miedo, con fortaleza, por la República. Los abrazo con todo mi corazón, los amo con locura. Hasta pronto porque esto recién comienza".


Se cantó el Himno Nacional y hubo lágrimas en la Plaza pero también había cánticos que prometían el regreso para 2023. Así, con una mezcla de sensaciones y emociones, el presidente Mauricio Macri se despidió ayer del gobierno con un acto en Plaza de Mayo, donde saludó con un "hasta pronto porque esto recién comienza" .

El líder del PRO selló su alianza con sus seguidores; instó a la gente a "no estar angustiada" por lo que viene pues "es un paso más de aprendizaje y crecimiento hacia el futuro" y exhortó "cuidar a la querida Argentina para que no la roben, no la maltraten, no la estafen ni la descuiden nunca jamás".

Al hablar a una multitud desde un escenario colocado en la plaza, apenas a unos metros de las vallas que rodean la Casa Rosada, Macri instó a "defender la democracia, la calidad institucional y nuestras libertades" y prometió a su sucesor, Alberto Fernández, que "puede confiar en que después de mucho tiempo va a encontrar una oposición constructiva y no destructiva".

"Me da tristeza ver que muchos de ustedes están angustiados acerca de lo que viene. No tenemos que estar angustiados, es un paso más de aprendizaje y crecimiento hacia ese futuro que todos deseamos", sostuvo Macri, mientras la gente decía "sí", admitiendo que tenía ese supuesto temor.

Macri, de camisa celeste arremangada y pantalón azul, estuvo acompañado en todo momento por su esposa, Juliana Awada, que lucía un vestido largo color violeta con incrustaciones plateadas, y el senador peronista y excandidato a vicepresidente Miguel Ángel Pichetto, vestido con un ambo azul y camisa celeste.

Los tres se asomaron al balcón de la Casa Rosada cerca de las 18.45, tras unos breves saludos donde hubo ovaciones a Macri y Pichetto (a quien el primer mandatario alzó el brazo izquierdo) y la entonación del Himno Nacional, descendieron por las escaleras a la calle y se dirigieron al escenario desde el cual el jefe de Estado habló unos diez minutos.

Tras iniciar su mensaje con un "buenas tardes, argentinos" y varios "gracias de corazón", Macri sostuvo que "me guardo tantas cosas que hemos vivido juntos que me va explotar este corazón, que es más de ustedes que mío".

Agradeció además por "acompañar estos cuatro años de transformaciones poniendo todo" e hizo "una mención especial a las mujeres que se movilizaron de manera impresionante en estos cuatro años".

El primer mandatario dijo que siente "tristeza sin duda por no seguir trabajando juntos en esas reformas que el país necesita", pero destacó que "somos más los que vemos la realidad de otra manera, ligada a la verdad, al respeto, al trabajo; estamos cada vez más juntos para defender las cosas que hemos logrado y defendernos si alguno quiere abusar".

"Le quiero decir al presidente electo que va a encontrar después de mucho tiempo una oposición firme y severa que va a defender la democracia, la calidad institucional y nuestras libertades", enfatizó.

"Lo único no negociable son nuestras libertades, por eso también todos queremos una justicia independiente, que se base en la ley, en los procedimientos, en las pruebas, como siempre tiene que ser y no en los discursos políticos", aseveró también en referencia a la declaración reciente de la expresidenta Cristina Fernández en el juicio en su contra.

También reiteró que "somos una alternativa sana de poder que representa a millones y millones de argentinos que nunca jamás se van a volver a resignar".

Saludó con un "hasta pronto" a la multitud que lo aclamaba y ex- hortó a "cuidar a la Argentina para que no la roben nunca jamás".

> Con banderas, cumbias y selfies

Con banderas argentinas, gorritos, pancartas y al son de cumbias y canciones optimistas de Axel, los adherentes caminaron por la plaza, sacándose selfies entre ellos y también con algún que otro funcionario nacional, como Hernán Lombardi, que se convirtió en uno de los más enfáticos arengadores en las marchas macristas.

En el mangrullo de sonido levantado en medio de la plaza fue colgado una pancarta con la leyenda "Somos los que queremos un país normal". Y sobraron los carteles que replicaron los hashtag utilizados para la convocatoria a través de las redes sociales: #7DLaMarchaDeLaMitadDelPaís, #7DCelebramosLaRepublica, el mentado Sí se puede y #7DEstoRecienEmpieza, que alude al retorno del macrismo como espacio opositor.

Varios de los carteles se repartieron en las calles periféricas a la Plaza de Mayo y hasta en la zona del bajo, donde militantes de Juntos por el Cambio las regalaban a quienes llegaron desde distintas ciudades con micros y colectivos alquilados.

"Hay gato para rato" y "la queremos presa" fueron algunas de las canciones que entonaron los militantes llegados a Plaza de Mayo. El acto comenzó con una hora de demora. Si bien miles de personas se acercaron hasta la plaza, la convocatoria no fue tan nutrida como en los actos anteriores a las elecciones del 27 de octubre.

  • El primer no peronista que completa

Macri sostuvo que los años de su gestión "fueron más difíciles de lo que imaginé, con mucho palo en la rueda" pero que igual rompió la mala racha de los gobiernos no peronistas. Macri es el primer presidente no peronista en completar su mandato en casi 100 años de democracia.