El presidente Mauricio Macri visitará al papa Francisco el 27 de febrero próximo, irá con una comitiva acotada y sólo pasará una noche en Roma, para estar presente en el inicio de las sesiones ordinarias, previstas para el próximo 1 de marzo.
El encuentro será la primera entrevista oficial entre el presidente y Francisco desde que Macri asumió la jefatura de Estado el pasado 10 de diciembre.
La audiencia, según se informó de manera oficial, tendrá lugar a las 10.30 hora de Roma (6.30 de Buenos Aires), y fuentes del gobierno nacional informaron a los periodistas acreditados en Casa Rosada que Macri irá con una comitiva acotada y que tiene previsto viajar el viernes 26 y regresar a Buenos Aires el domingo 28.
Además, desmintieron que sea ‘mala‘ la relación entre el mandatario y Francisco: ‘Es normal, buena, aunque la gente diga otra cosa porque no se ven todos los días‘.
El miércoles se había manifestado en sintonía el jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien en declaraciones a la radio Cadena 3 indicó que mantienen una ‘relación personal muy linda, que lleva muchos años‘ y recordó que fueron ‘vecinos en el Gobierno porteño‘, cuando Macri tenía a su cargo el Ejecutivo de la ciudad de Buenos Aires y Jorge Bergoglio era Arzobispo.
‘Cuando fue ungido papa la primera persona que saludó fue a Macri; por una decisión personal de él‘, aseguró Peña, y agregó: ‘No creemos que haga falta utilizar la figura del Papa. Él tiene una tarea enorme con la humanidad‘.
El último encuentro entre Francisco y Macri fue en el 2014, cuando el mandatario concurrió a la Santa Sede acompañado por su mujer, Juliana Awada, y su hija Antonia, y el 17 de diciembre de 2015 lo llamó para saludarlo por su cumpleaños número 79.
Esta primera visita oficial al Vaticano se enmarca en la falta de una pronunciación por parte del Papa con relación al nuevo gobierno de Cambiemos, y ya había sido adelantado por la canciller Susana Malcorra, cuando a mediados de mes señaló que ‘en algún momento en los próximos meses, el Presidente viajará a Italia para encontrarse con el Papa‘.
El Presidente le envió un fuerte gesto a la Iglesia el martes, cuando viajó a Córdoba para la festividad del beato José Gabriel Brochero, que próximamente será canonizado por Francisco. Se trata del cura gaucho de la Traslasierra cordobesa, a quien se impulsa hoy como modelo sacerdotal, por el espíritu evangelizador que desplegó hace más de un siglo en los caminos serranos.