En la Rosada. El presidente Mauricio Macri, junto a la primera dama Juliana Awada, al recibir y saludar en la Casa Rosada al mandatario de Francia, Emmanuel Macron, y su esposa, Brigitte Trogneux.

En su visita al país en el marco de la Cumbre del G-20, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, elogió el camino de reformas iniciado por el presidente Mauricio Macri y apostó a que con ello "reforzará la confianza de los inversores" en Argentina. Pero advirtió lejana la posibilidad de concluir un acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur.

"No estamos aún en situación de concluir el acuerdo con el Mercosur", dijo Macron en un artículo que publicó ayer el diario La Nación.

Tras reunirse con Macri en la Casa Rosada, el presidente francés dijo que "tenemos que ver estas negociaciones (con el Mercosur) de manera más amplia. En Brasil acaba de producirse un cambio político importante y el Mercosur debe analizar la naturaleza del impacto de este cambio".

Macron fue contundente a la hora de definir cómo está hoy la negociación con el Mercosur. A las diferencias conocidas en el sector agrícola (los productores franceses temen por la entrada generalizada de productos de Brasil y Argentina), el presidente francés apuntó a un nuevo escenario intra Mercosur con el triunfo de Jair Bolsonaro, presidente electo de Brasil. Puntualmente señaló que "el Mercosur tendrá que definir primero qué hará con el bloque antes de continuar negociando con la Unión Europea". Es que desde el entorno de Bolsonaro ya avisaron que el Mercosur no era prioridad y que se impone una reforma si se quiere seguir con el bloque.

Macron dijo que para que su país apoye un acuerdo comercial entre la Unión Europea y el Mercosur, deben "plantearse" si el cambio de Gobierno en Brasil, con Jair Bolsonaro al frente, implica algún cambio en la política climática. Macron sostuvo que el anuncio del presidente electo Jair Bolsonaro de retirar a Brasil del Acuerdo de París contra el cambio climático vuelve imposible a Francia firmar un acuerdo de libre comercio con el Mercosur.

El francés llegó a la ciudad de Buenos Aires para participar de la Cumbre de los 20 países más industrializados (G-20) que empieza hoy y termina mañana. El líder europeo mantuvo ayer al mediodía una reunión en la Casa Rosada con Macri.

Macron expresó al diario La Nación su apoyo al gobierno de Macri y su convicción de que la Argentina "reforzará la confianza de los inversores". Sobre las reformas económicas argentinas, destacó el hecho de que haya decidido "no ceder a lo fácil" y seguir el camino de "las reformas profundas de la economía", y mencionó el sector energético. En una declaración a la prensa en Casa de Gobierno, Macri le agradeció a su par de Francia "el enorme apoyo" para el acuerdo que la Argentina logró con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

No había nadie para recibirlo, un papelón


Macron llegó el miércoles por la noche al aeropuerto de Ezeiza y no había nadie para recibirlo. La vicepresidenta Gabriela Michetti pudo interceptar y darle la bienvenida al Presidente cuando estaba por subirse a su auto oficial.

"Estuve una hora y cuarto antes en la pista esperando que llegara el avión. Salí temprano de casa", dijo la vicepresidenta en declaraciones radiales. Los cortocircuitos se desencadenaron cuando el avión tocó tierra. "Cuando ponen la alfombra roja y arranco con la silla como para ir, una persona de protocolo me dice: "No, no, la PSA (Policía de Seguridad Aeroportuaria) nos dice que esperemos, Macron no está bajando", continuó.

Sin embargo, fue justo en ese momento cuando el mandatario y su esposa Brigitte Marie-Claude Trogneux descendieron de la aeronave y avanzaron hacia el auto oficial. En ese recorrido le dio un saludo cordial al personal aeroportuario. Michetti admitió que "seguramente hubo alguna responsabilidad de gente del protocolo", pero indicó que el hecho "no tiene trascendencia".