En la ciudad cordobesa de Cruz del Eje, un hombre había estado con sus hijos, de 4 y 7 años, durante el fin de semana, según el marco de régimen de visitas acordado tras la separación de su mujer. Pero como no los restituyó el domingo en el horario acordado, la madre de los pequeños fue ayer a su búsqueda, acompañada de un policía y se encontró con una situación desgarradora.
El hombre y sus dos hijos estaban muertos. Según las primeras investigaciones, el padre mató a sus dos hijos, y luego se suicidó en la vivienda ubicada en la calle La Rioja al 300, en la ciudad de Cruz del Eje, Norte de Córdoba.
El padre de los niños fue identificado por fuentes policiales como Jorge Jerónimo, de 48 años, quien estaba separado desde hace tres años de su esposa y había recuperado su libertad meses atrás, luego de cumplir una condena de dos años de prisión en una causa por narcotráfico.
El comisario mayor Guillermo Cortez dijo a la prensa local que al parecer el hombre mató primero a la niña de 4 años y luego al varón de 7. Jerónimo utilizó una escopeta que tenía en su casa para perpetrar los crímenes y luego suicidarse.
Los investigadores dijeron que en la vivienda se hallaron varios cuchillos y una escopeta en manos del hombre, con lo cual señalaron que se puede confirmar que tras matar a los niños el padre se suicidó.
Según Cortez, el domingo en horas de la tarde tenía que restituir los niños a la madre; como no fue así, “la mujer fue hasta el domicilio pero no había nadie en la vivienda. Esperó un par de horas más y como no logró contactarse con nadie hizo la denuncia en la unidad judicial” de Cruz del Eje. Recién a las 10.30 de ayer, añadió, tomaron “conocimiento que en un dormitorio yacía esta persona sin vida y los niños en otra habitación”.
La madre de los niños, de 28 años, comentó a sus allegados que había radicado la denuncia por temor a que el hombre se hubiera llevado a sus hijos a otra ciudad.
Jorge Jerónimo había buscado a los chicos el sábado ya que ellos vivían con la madre. Le tocaba visita y todo indica que la mujer no percibió ninguna alteración o cambio de conducta.
La mujer quedó shockeada tras hallar muertos a sus hijos, por lo que además de la contención familiar recibía asistencia psicológica.