El Gobierno nacional confirmó ayer que ahora está elaborando alternativas en materia tarifaria para el consumo residencial de gas natural por redes, para ‘mejorar‘ la propuesta del tope de 400 por ciento de incremento respecto de lo pagado en el mismo bimestre del año pasado, que impulsó el Ministerio de Energía.
La propuesta será llevada por el gobierno a la audiencia pública prevista para el 16 de septiembre, ‘que va a tener lugar en la Capital Federal pero también en ciudades del interior del país (teleconferencias) para que todos puedan expresarse y aportar. Según adelantó Frigerio, la intención del gobierno es que el aumento de las tarifas se produzca a partir de octubre próximo, y consultado sobre si el tope de incremento del 400 por ciento era inamovible, respondió: ‘No, nosotros estamos mejorando nuestra propuesta y eso es lo que vamos a llevar a la audiencia‘.
Para el Gobierno la sentencia de la Corte Suprema de Justicia -que anuló los incrementos y ordenó hacer audiencia previa para considerar el precio del gas en boca de pozo, y del transporte y distribución del gas por redes- ‘es inapelable y hay que cumplirla‘. Y, en función de esos lineamientos del fallo, se está armando una nueva propuesta que es más progresiva, que mantiene lo que era lo más importante de la propuesta anterior: la
tarifa social para 12 millones de argentinos.
El plan es que hasta la audiencia se siga trabajando con gobernadores, intendentes, consumidores y sindicatos para llevar la mejor propuesta posible en términos de tarifas, que contemplen la principal necesidad que es que Argentina no se quede sin energía.
Tras el fallido intento tarifario, el ala política del gobierno activó gestiones con legisladores de la oposición (principalmente del massismo), gobernadores y sindicalistas de la CGT procurando un acuerdo que le permita sortear con éxito el capítulo de la audiencia pública y la aplicación de los aumentos en las tarifas del gas y la electricidad, evitando nuevas acciones judiciales.
Asimismo está prevista otra audiencia, que por ahora se programó para octubre pero que podría postergarse, para avanzar en la Revisión Tarifaria Integral (RTI) que analiza los costos, planes de inversión y precios para toda la cadena del servicio.
Según fuentes oficiales y privadas del rubro, ahora se están considerando diversas alternativas de esquemas tarifarios: *La ratificación de los aumentos con topes (400 y 500 por ciento, para residenciales y pymes respectivamente), criterio que no aporta al uso racional del recurso. *Activar un esquema de ‘factura plana‘ según el cual el costo del gas consumido se prorratea a lo largo de 12 meses para evitar saltos bruscos en los meses de mayor consumo. Sería a partir de 2017 tomando en cuenta consumos de 2016, con incrementos progresivos considerando evolución de costos, y de rentabilidad. *Un esquema tarifario con aumentos graduales para los próximos cuatro años junto a una reducción de los subsidios hasta su eliminación total en 2019.

