El ex jefe del Ejército César Milani fue absuelto ayer de todos los delitos en el juicio de lesa humanidad que se le seguía en La Rioja por el secuestro y las torturas sufridas por Pedro Olivera y su hijo, Ramón, durante la última dictadura militar. Además el Tribunal Oral Federal de La Rioja ordenó la inmediata liberación del general retirado que estuvo al mando del Ejército durante la segunda presidencia de Cristina Fernández de Kirchner. 

Frente a este sorpresivo fallo, al que la querella calificó como "una canallada", el Gobierno ya adelantó que apelará esta absolución.

En este sentido, el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, aseguró ayer que respeta el fallo de la Justicia que absolvió a Milani pero adelantó que seguirá "acompañando" a la familia Olivera "en su búsqueda de la verdad. Desde la querella de la Secretaría de Derechos Humanos esperaremos los fundamentos de la sentencia para apelar este fallo", señaló Avruj en una mensaje escrito en las redes sociales. 

Milani estaba acusado de los delitos de privación ilegítima de la libertad, aplicación de tormentos y asociación ilícita y los representantes de las querellas y la Fiscalía habían solicitado entre 20 y 18 años para el uniformado. Milani asistió a la lectura del veredicto con gesto adusto y no exteriorizó emociones al conocer el fallo que lo declaraba inocente.

"Estoy de pie, no me van a quebrar", sostuvo el ex jefe del Ejército al pronunciar sus últimas palabras en este juicio. "Estoy tranquilo y sigo vistiendo con orgullo el uniforme de la Patria y ahora espero que la Justicia reivindique el buen nombre y honor de mi persona y mi familia", añadió Milani ante el Tribunal antes de la sentencia.