Una joven de 19 años fue asesinada de varias puñaladas en un femicidio ocurrido en la ciudad bonaerense de Rojas, por el que quedó detenido su exnovio, un policía bonaerense, lo que generó el lunes y anoche fuertes protestas frente a la comisaría local donde hubo destrozos y disparos de balas de goma, informaron fuentes policiales. La víctima fue identificada como Úrsula Bahillo (19), hija de un comerciante local, quien fue encontrada muerta a puñaladas en una zona rural donde había sido citada por su expareja, Matías Ezequiel Martínez (25), un oficial de la Policía bonaerense que estaba con carpeta psiquiátrica desde septiembre del 2020 y que intentó suicidarse luego del crimen. Según las fuentes, la víctima ya había denunciado a Martínez por violencia de género, por lo que había una medida de restricción perimetral, pero se cree que el ahora imputado la citó para tener una charla y, tras una fuerte discusión, la asesinó a puñaladas y con la misma arma blanca se autoprovocó una serie de lesiones.

El policía, que se desempeña en un Destacamento de San Nicolás pero estaba con licencia psiquiátrica hace unos cinco meses, quedó detenido en sede policial a disposición de la Justicia acusado de "homicidio calificado por violencia de género" (femicidio). Al conocerse el crimen, amigos de la víctima y cientos de vecinos salieron a las calles para reclamar justicia el lunes por la noche, lo que terminó con una serie de incidentes, destrozos, balas de goma y heridos frente a la comisaría de Rojas. En el marco de la primera protesta, una camioneta policial Toyota Hilux que estaba estacionada frente a un colegio, fue incendiada y empujada contra el edificio policial. También hubo marchas y protestas frente a los domicilios de dos fiscales y de un juez de paz.

La segunda movilización comenzó a las 17 de ayer en la plaza principal de Rojas, donde cientos de manifestantes, en su mayoría mujeres, se reunieron con pancartas y pidieron con aplausos "cárcel" para Martínez (25). "Úrsula era buena compañera, no se puede creer esto que pasó, tranquilamente podríamos haber sido cualquiera de las que estamos acá", dijo al canal Crónica Televisión una excompañera del colegio secundario de la víctima que participó del acto.

Por la conmoción, las protestas y los incidentes, el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, se trasladó hasta la localidad y se interiorizó de la investigación, los reclamos vecinales y charló con la madre de la víctima. Según el funcionario, "La Justicia debe abordar" la problemática de los femicidios "de otra forma", ya que consideró que "hay una mirada equivocada de cómo entender esta situación". Respecto al supuesto femicida, Berni señaló que "no estaba cumpliendo ninguna función, estaba apartado, no tenía su arma reglamentaria, no estaba trabajando, estaba con una carpeta psiquiátrica". "Ante una carpeta psiquiátrica después aparecen las inimputabilidades, o sea que aduciendo que estaba en un estado psiquiátrico no sabía lo que hacía", dijo el ministro. Por último, sobre la reunión con Patricia, la madre de la víctima, Berni indicó: "Estamos ante una situación muy dolorosa, era mi obligación venir y compartir con la madre algunos cuestionamientos"


Pruebas

Hay innumerables testimonios de la violencia que ejercía Martínez contra la joven y capturas de conversaciones (ver infografía) donde la víctima relataba la violencia física y psicológica de la que era víctima. La Justicia bonaerense ya tiene esos elementos en su poder y serán prueba fundamental en la causa.