El Gobierno le hizo un guiño a Mendoza con el envío de dinero para que arranque una licitación. Se trata de US$ 1.023 millones para la represa Portezuelo del Viento. La obra se construirá en Malargüe y servirá para darle energía a 130.000 usuarios, pero además tiene otros beneficios para sectores económicos mendocinos.

La lectura política es que el gobernador y jefe nacional de la UCR, Alfredo Cornejo, recibió así una rápida compensación por haberle sido negada la pretensión de ocupar la presidencia de la Cámara baja en caso de que Mauricio Macri resulte reelecto. Y tras el apartamiento de la UCR de la carrera por un lugar en la fórmula presidencial.

Cornejo firmó el acuerdo con el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y el de Hacienda, Nicolás Dujovne. Aunque siempre la foto suele retratar caras de satisfacción, la relación entre el radical y la plana mayor del PRO está lastimada.

En la reciente primaria mendocina, el candidato radical Rodolfo Suárez, de la escudería del gobernador - que no tiene reelección- superó al de PRO, Omar de Marchi. La sumatoria de ambas fuerzas orilló el 42%, contra el 35% de las dos vertientes peronistas. La triunfadora de la interna opositora fue la camporista Anabel Fernandez Sagasti. Y eso podría ahuyentar a los peronistas más moderados, que se volcaron por Alejandro Bermejo.

Casi con seguridad, Cornejo será candidato a diputado nacional por el nuevo combo oficialista, untos por el Cambio. Se estima que la lista está en condiciones de ganar las elecciones y arrastrar votos para la fórmula Macri-Pichetto, aunque antes deberá atravesar la pelea de fondo en la provincia, el 29 de septiembre.

La presa se construirá en Malargüe y será capaz de proveer de energía a 130.000 usuarios, un tercio más de los que actualmente tiene el servicio domiciliario y cuatro veces más de lo que genera el dique Potrerillos.

"No sólo generará energía sino que también mejorará el riego en la región y servirá como una protección contra las inundaciones de la cuenca media y superior del rio Colorado”, explicó Frigerio. La provincia recibirá los bonos equivalentes a US$ 1.023 millones en los próximos cinco años. Con eso debe cubrir la obra civil hidroeléctrica y la traza de dos rutas. Los tiempos para la ejecución de la licitación los manejará la provincia.

"Fueron sucesivos acuerdos que no se cumplieron y que hoy se hicieron realidad”, afirmó Cornejo.