Un nuevo tratamiento no invasivo para reducir la grasa de la zona de la papada se presentó recientemente en Buenos Aires. El procedimiento consiste en aplicar frío para ‘destruir‘ las células adiposas, sin necesidad de recurrir al bisturí.
Se trabaja con un concepto llamado criolipólisis, que fue desarrollado en Estados Unidos para destruir las células grasas (adipocitos) bajando su temperatura de forma controlada‘, afirmó a la agencia de noticias Télam Luciano Lanfranchi, doctor en medicina y cirugía y especialista en cirugía plástica reconstructiva y estética.
Es un procedimiento 100 por ciento seguro, que no produce quemaduras, precisó Lanfranchi, quien detalló que los resultados son definitivos. El cirujano, que trabaja en Milán (Italia) y Dubai (Emiratos Árabes), comentó que esa tecnología ya demostró ser eficiente para combatir la grasa localizada en abdomen y piernas, y que la alternativa para la papada ‘es indolora, dura 60 minutos, no requiere tiempo de inactividad y los resultados se ven en dos o tres meses, cuando el cuerpo logra eliminar de forma natural los adipocitos de la zona‘. ‘Durante la hora que dura el procedimiento un aplicador administra frío, una experiencia para nada traumática para el paciente ya que no usa agujas ni anestesia. Luego de tres meses, las células grasas cristalizadas degeneran y son eliminadas del cuerpo de forma natural, permitiendo que el tejido vuelva a su apariencia primera‘, destacó.
La criolipólisis se sirve de un dispositivo con forma de placa que se aplica a la piel enfriando los adipocitos (células grasas). El tratamiento consiste en aplicar en la zona seleccionada un dispositivo transductor (manipula a modo de aspirador) que combina presión de vacío (para captar y absorber el tejido subcutáneo graso a eliminar) y frío a temperatura controlada de entre 2 y 4 grados. Las células grasas son sensibles al frío. Dicho aplicador transmite frío constante al área que se quiere tratar. Una vez que las células grasas se ven afectadas por el frío, comienza un proceso de muerte natural de las mismas, que serán eliminadas por el organismo.
Ezequiel Chouela, miembro de Sociedad Argentina de Dermatología, destacó que ‘con sustento histológico y ecográfico de evaluación, la reducción media de la capa de grasa alcanza un 20 por ciento dos meses después de realizado solamente un procedimiento‘, puntualizó.
Por su parte, la cirujana plástica especialista en estética Griselda Seleme destacó que ‘el médico debe determinar si el paciente es buen candidato y conocer en profundidad sus deseos sobre los resultados para no generar falsas expectativas, por lo que recomendamos registrar el peso y las fotografías previas para complementar el formulario de evaluación‘. Por último, la nutricionista Silvana Dato comentó que ‘es la mejor alternativa para el rejuvenecimiento durante el climaterio‘. ‘En esa etapa de la vida se producen cambios en la distribución de la localización de la adiposidad y su composición, ya que se reduce el tejido magro y aumenta el tejido adiposo. Eso se nota mucho en brazos, espalda, cara interna del muslo y abdomen‘, señaló.