Buenos Aires, 23 de noviembre.- El alerta amarillo advierte sobre olas de calor que "pueden ser peligrosas, especialmente para los bebés y niños pequeños, personas mayores de 65 años" y las que padecen enfermedades crónicas, por lo que "se requiere la toma de medidas preventivas", precisa el SMN.

El pronóstico prevé, entre hoy y el martes, registros máximos de hasta 40 grados en la franja central y norpatagónica del país.

En un informe especial titulado "Altas temperaturas", el SMN indicó que "una masa de aire caluroso afecta el centro y norte de la Patagonia, Cuyo, la zona central, el sur del Litoral y la provincia de Buenos Aires".

En ese marco, estimó que habrá máximas de "entre 33 y 39 grados centígrados, pudiendo superarse puntualmente los 40 grados, especialmente sobre el norte de la Patagonia y el sudoeste de Buenos Aires".

Hoy los registros más altos del país fueron en la Patagonia, con 38 grados en Viedma, la capital rionegrina, y en Rawson, capital de Chubut.

Máximas de 36 grados hubo en Resistencia, corrientes, San Luis, Santa Fe, Neuquén y Paraná; de 35 en Formosa, La Rioja y Mendoza y de 34 en La Plata y en Capital. Las marcas más bajas del país fueron en Río Gallegos (22), Puerto Argentino (Islas Malvinas, 19) y Ushuaia, con 15 grados.

En la ciudad de Buenos Aires a las 16 el temrómetro marcaba 32,6 grados y la sensación térmica era de 33,6, un grado más, el viento noreste de 5 kilómetros por hora casi n ose sentía y la humedad relativa era del 42%.

La estación meteorológica adelantó que estas temperaturas tenderán a disminuir el martes "en la región Patagónica y se mantendrán elevadas en el resto del área".

Desde que comenzó el calor, las autoridades nacionales han inistido en las medidas a tomar para evitar complicaciones, especialmente por la exposición al sol.

Al respecto, recomiendan evitar el sol entre las 10 y las 16, proteger el cuerpo y la cabeza con prendas claras y sombreros, usar lentes oscuros y protectores de radiación ultravioleta -de al menos 20-, beber mucha agua para evitar la deshidratación y no exponer a los rayos solares a los bebés.