El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Ojea, destacó que la Argentina le haya "ofrecido al mundo" un compatriota como Jorge Bergoglio que "le está haciendo un gran bien" al planeta, y cuestionó que en algunos ambientes o sectores nacionales sus gestos hayan sido "desfigurados o reinterpretados", al realizar un recorrido por los 10 años de pontificado del papa Francisco.

"Es imborrable. Hacía poco que era obispo de San Isidro. Yo no lo pude creer, pegué un grito y mandé a tocar las campanas. Habíamos estado hablando un mes antes sobre su renuncia. Me había dicho que tenía planes de confesar en San Cayetano o San Pantaleón, que iba a vivir en Flores. Yo ni soñaba que podía ser Papa. Esa noche soñé que no era verdad. Entonces me despertaba inquieto, pero con la alegría de saber que era verdad. Le escribí al nuevo Papa, le conté el sueño y me contestó que se había reído mucho y que a él también le había parecido un poco loco cuando subían los votos. Y me dijo: ‘Desde ese momento, sentí una paz que, de movida, sabía que no venía de mí. Me siento blindado por ella y gracias a esa paz sobrevivo’", comento Ojea sobre aquel 13 de marzo de 2013.

Mientras que, en torno a los gestos de servicio y simplicidad que busca transmitir el Papa, Ojea indicó que, "Lampedusa es el lugar de unión de dos continentes, donde la gente huye desde el África, de la guerra y del hambre. Francisco quiso denunciar la globalización de la indiferencia y decirnos que el mundo había perdido su sentido de responsabilidad. Desde allí, la cantidad de gestos hacia los últimos: sus lavatorios de pies a los más humildes en las cárceles, abrir San Pedro para los hombres en situación de calle, invitar a comer a los más pobres de Roma. Hasta finalmente este último viaje a Sudan, que sentía como una enorme deuda porque por su rodilla no había podido ir. Invitó a los lideres de Sudan para poder hablar de paz. Se sentía muy comprometido a este viaje donde hizo visible lo invisible. Esos viajes han demostrado que quiso siempre colocar a la Iglesia en el lugar de los últimos".

Y en relación a la importancia que le otorga Francisco al cambio climático y la ecología, afirmó: "A un crisis ambiental corresponde una crisis social. Para el Papa, la raíz de la enfermedad del agua, del suelo y del aire está en el corazón humano. Hay algo en el corazón humano que tiende a ver la naturaleza como si fuera un cuadro, donde yo puedo extraer y sacar todo lo que desee, sintiéndome el centro y negando el principio bíblico de que el hombre está llamado a cuidar. Nos habla del paradigma del extractivismo, el paradigma tecnológico, que es sacar a cualquier precio, y muchas veces sin protocolo, los minerales y las riquezas de la tierra, no cuidando, por ejemplo, la contaminación del agua, siendo indiferentes a la tala indiscriminada de árboles y al calentamiento global El Papa une estos problemas a esta visión del hombre que quiere dominarlo todo. El otro paradigma es el del cuidado. Tenemos que aprender a cuidarnos y a cuidar, y para esto hace falta una nueva cultura, donde cambien los estilos de vida, los hábitos de consumo. No lo resuelve un congreso, lideres o científicas, sino que tiene que ver con un tema en la educación".

También se refirió a la tarea del Papa vinculada a la pobreza: "Francisco dice que los pobres son como maestros. Conservan valores y tradiciones de solidaridad, convivencia y respeto que en nuestras sociedades de clase media han desaparecido. Francisco quiere ponerlos en el centro del camino de la iglesia porque seguimos a un Dios que nació, vivió y murió pobre. El Evangelio está recorrido de justicia, compasión y misericordia, de modo que el cristiano debe trabajar para la promoción social. Muchas veces se escucha que la iglesia es partidaria de un pobrismo. ¿No saben lo que trabaja la Iglesia en centros marginales para poder sacar a los chicos de la droga? Son los Hogares de Cristo. Ellos dicen salir de las tres C ‘calle, cárcel y cementerio" para entrar en las tres C vitales "club, colegio y capilla’. El Papa tiene una mirada sobre la economía popular importante. Lo ha demostrado en sus discursos a los movimientos sociales", afirmó.

Fuente: Télam