Mauricio Macri dijo ayer que sólo "poniendo la verdad sobre la mesa" se pueden comenzar a corregir los problemas de pobreza, al inaugurar el comedor comunitario "Isidro Antúnez", en homenaje al esposo de la dirigente social Margarita Barrientos en Añatuya, a 220 Km al sureste de la capital de Santiago.

El Presidente dijo que trabajaba para que cada ciudadano de ese lugar "pueda elegir donde vivir y trabajar sin abandonar su pueblo y su provincia". "Este edificio es mucho más que eso, es un hogar para 20 mujeres con ganas de vivir mejor, hemos trabajado con Margarita en nuevos proyectos, porque ella nos ayudó a entender de que estamos hecho los argentinos, que somos solidarios, buena gente que quiere tirar en dirección al progreso, para que los pibes puedan salir adelante con su trabajo", añadió.

En otro pasaje de su discurso, Macri recordó que a Margarita y a su esposo, que falleció en forma inesperada cuando dirigía los tramos finales de la construcción del comedor y albergue, "los conocí hace mucho tiempo y ellos siempre creyeron que se puede, que no estamos condenados, hoy no tienen que confiar en mí sino en ustedes, en lo que son capaces de hacer". Asimismo y ante cientos de pobladores de la denominada "Ciudad de la Tradición", el Presidente anunció la construcción de un complejo polideportivo y la extensión de la red y tratamiento de líquidos cloacales. A su turno, la titular de la Fundación Los Piletones, destacó que el espacio era un terreno baldío que se rellenó con tierra trasportada por 50 camiones y la construcción del inmueble fue financiada a través de un subsidio del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.