Los presidentes de todos los bloques que integran la Cámara de Diputados acordaron ayer con el presidente del cuerpo, Emilio Monzó (PRO), la eliminación del sistema de canje por dinero de pasajes aéreos y terrestres asignados a los legisladores nacionales, tras la polémica generada por el uso de ese mecanismo.

En la reunión, los titulares de las diferentes bancadas coincidieron en la necesidad de eliminar esa modalidad y dejaron en las manos de Monzó el diseño de las alternativas de movilidad para aquellos diputados que no se trasladan en avión.

Actualmente cada uno de los 257 diputados recibe 40 tramos de pasajes mensuales (20 aéreos y 20 terrestres) y en el caso de no utilizarlos o de tener sobrantes, pueden canjearlos por dinero a una cotización aproximada de 1.300 y 600 pesos, respectivamente. Así, si un diputado devolvía los 40 tramos se podía alzar con un ingreso mensual adicional de aproximadamente 40.000 pesos, situación que se daba mayoritariamente entre los diputados de la Ciudad de Buenos Aires y del conurbano, que pasaban así percibir un sobresueldo.

La variante que cobra más fuerza es la de darle a los legisladores la opción de optar entre los tramos aéreos o un monto de dinero de entre 25.000 y 40.000 pesos abonado bajo el concepto de "gastos de movilidad".

Otra alternativa analizada es la de fijar un radio de 300 km desde la Ciudad de Buenos Aires, y que quienes están fuera de esa zona reciban los tramos de pasajes y que quienes están dentro reciban la suma de dinero.