En una reunión en la Casa Rosada, representantes del Gobierno argentino intentaron apaciguar un foco de tensión diplomática con Estados Unidos, desatado por el acto al que convocó Evo Morales para este domingo en la frontera de Salta con Bolivia.

EEUU presiona para desactivar el acto, que hasta la tarde de ayer ya nadie quería dar por confirmado, según medios nacionales.

En la Embajada de EEUU no ocultan el disgusto al considerar que el expresidente Morales incumple su condición de "refugiado" porque se involucra en cuestiones políticas. Fue el propio Evo quien informó sobre el congreso que tendrá como objetivo definir al candidato del MAS para las próximas elecciones de Bolivia.

Los funcionarios de la Embajada estadounidense en Argentina, Chris Andino y Mary Kay Carlson, fueron recibidos ayer en la Casa Rosada por el canciller Felipe Solá y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz.

La Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires pidió ayer al Gobierno argentino que apoye "la democracia en Bolivia" y que el depuesto presidente de ese país, Evo Morales, "no abuse de su estatus" de refugiado que le otorgó la administración de Alberto Fernández.

Voceros de la delegación estadounidense confiaron a medios de prensa internacionales que pretendían "un comportamiento de buen vecino" por parte del gobierno argentino, y mostraron así su malestar con un acto que el domingo encabezará Morales con referentes de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS).

Fuentes diplomáticas indicaron que los funcionarios de la Embajada de Estados Unidos se reúnen regularmente con el Ejecutivo argentino. Voceros de la Cancillería aseguraron que el Gobierno argentino no contestará la declaración emitida por la Embajada de Estados Unidos, y confirmaron que Evo Morales continuará con sus actividades políticas en el país.

El mandatario derrocado por el golpe de Estado el pasado 10 de noviembre confirmó que el domingo liderará una reunión con dirigentes de su partido, Movimiento al Socialismo (MAS).

Esa reunión marcará el inicio de un proceso para elegir el candidato presidencial que representará al MAS en unos comicios que aún no tienen una fecha definida.

La idea es que la reunión sea en el complejo polideportivo de Orán (Salta), hasta donde llegarán mil dirigentes del partido. En Salta ya admiten que hay preocupación porque se garantice el operativo de seguridad.

Es que además de los invitados del MAS que acompañarán a Evo, esperan una fuerte movilización de bolivianos que cruzarán la frontera para darle su apoyo y también la congregación de la comunidad boliviana local.

Desde el entorno del gobernador Gustavo Sáenz confirmaron al sitio La Política Online que todavía no tienen un anuncio oficial sobre el acto. "El gobernador no va obstaculizar ningún acto, por supuesto, y de ser necesario el Ministerio de Seguridad está preparado para responder a cualquier pedido de la Nación", aseguraron.

Después de anunciar la convocatoria, el expresidente boliviano Evo Morales expresó en declaraciones a radio La Red que el gobierno argentino lo "acompañaría" para asegurar la seguridad del evento.


¿Desdoblar?

Según informaron ayer medios nacionales digitales, referentes salteños del kirchnerismo llevaron adelante reuniones con el ministro de gobierno de Sáenz para organizar el operativo, en las que se deslizó la posibilidad de "desdoblar" la actividad y pedir que una parte se realice en Buenos Aires.