El juez Claudio Bonadio procesó este lunes a Cristina Kirchner por asociación ilícita, cohecho pasivo y administración fraudulenta en la causa donde se investigó la compra de busques de Gas Licuado. En esta causa vinculada a los "cuadernos de las coimas" mantuvo el pedido de prisión preventiva. Asimismo, fueron procesados los ex funcionarios Julio De Vido y Roberto Baratta, a quienes también se les mantuvo la prisión preventiva. Los embargos, confirmaron fuentes judiciales a Clarín, van desde los 200 a 300 millones de pesos.

La ex presidenta sumó un nuevo procesamiento vinculado a la causa de corrupción más relevante de la historia, donde ya está acusada de ser jefa de la asociación ilícita que se dedicó a la recaudación de fondos ilegales que pagaban empresarios contratistas del Estado.

En esta oportunidad, como una ampliación de la asociación ilícita y nuevos hechos de cohecho pasivo, más una acusación por administración fraudulenta, el juez Bonadio la encontró responsable y la procesó manteniendo el pedido de prisión preventiva del expediente principal. 

En esta causa se incorporó un nuevo peritaje, ya que el primero que había sido utilizado para procesar y detener a Baratta y De Vido fue desestimado por la Cámara Federal porteña.