Luego de idas y vueltas y ante un endurecimiento de la cuarentena en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) con un posible impacto negativo sobre la actividad, el Gobierno dio marcha atrás con su plan de relajar la asistencia estatal a empresas con dificultades para pagar salarios. 

El gobierno mantendrá al menos un mes más el nivel de auxilio que instrumentó al comienzo de la cuarentena social y obligatoria a través del Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP). 

Con ligeros matices, el "ATP 3", como lo llaman en la jerga gubernamental, mantendrá el esquema originario de cobertura del 50% del salario neto de los empleados en relación de dependencia de todas las compañías que demuestren una "sustancial caída de la facturación", equivalente a una suba nominal interanual del 5%, o bien, caída real interanual de aproximadamente el 25%. 

Para el tercer mes consecutivo de ayuda a las compañías con dificultades para cumplir con el pago de su nómina, el Estado cubrirá la mitad del sueldo con el tope de 2 Salarios Mínimo Vitales y Móvil, es decir hasta $33.750. Dicha asistencia será para todas las empresas de sectores determinados como críticos: hotelería, turismo gastronomía y actividades recreativas.

La cobertura salarial con techo de $33.750 regirá una vez mas para todas las compañías, sin importar el sector, que se encuentran en zonas del país donde rige el ASPO y cuenten con menos de 800 empleados. De este modo, el gobierno garantizará una vez más a través de la ANSES el mismo nivel de transferencia que ya había ejecutado para las que tuvieron dificultades en el pago de haberes de abril y mayo.

Para las empresas en dificultades en otras zonas del país donde rige el distanciamiento social preventivo y obligatorio, el estado cubrirá hasta un salario mínimo vital y móvil, es decir $16.875.