En Concordia, la ciudad más afectada por las históricas inundaciones que golpean el noreste argentino, el presidente, Mauricio Macri, prometió ayer ayuda para reconstruir las zonas anegadas, en las que 20.000 personas permanecen evacuadas y reciben alimentos, agua potable y asistencia sanitaria.
El mandatario, que se vio forzado a interrumpir sus vacaciones en el sur del país por la tragedia, destacó la coordinación entre las autoridades nacionales, provinciales y locales y agradeció a los argentinos los numerosos gestos de solidaridad mostrados desde todos los puntos del país.
En menos de 72 horas, la organización Red Solidaria ha recibido 55 toneladas de donaciones, en especial ropa, agua potable, pañales y productos de limpieza.
En los centros de evacuados de Concordia, los vecinos más veteranos relatan ante las cámaras que es la cuarta, quinta e incluso sexta vez que el agua les arrebata todo lo que tienen, aunque la mayoría no recuerda una crecida del río Uruguay como la actual, la peor en más de 50 años, que ha dejado a un cuarto de la ciudad inundada.
Con el objetivo de minimizar futuras crecidas, Macri prometió que construirán ‘soluciones más permanentes‘ en cuanto el agua se retire, como represas y acueductos que eviten la acumulación del agua en casos de tormentas.
Por el momento, el cese de las precipitaciones ha estabilizado la crecida de los ríos y evitado nuevas evacuaciones.
El mandatario se comprometió a costear el 66 % de la construcción de viviendas para los damnificados y no descartó recurrir a financiación en el extranjero de ser necesario.
Según Macri, la gestión anterior, encabezada por Cristina Fernández, ‘se gastó hasta lo que no tenía‘, por lo que pidió paciencia para reunir los fondos necesarios. Además, instó a los argentinos a cuidar el medioambiente ‘consumiendo la menor cantidad de energía posible, consumiendo menos agua, reciclando basura‘.
‘Esta crecida, estas lluvias tienen que ver con esto, que hemos descuidado el medioambiente‘, dijo Macri.
Greenpeace advirtió ayer que la deforestación ha agravado las inundaciones que no solo castigan Argentina sino también Brasil, Paraguay y Uruguay, con un total de al menos 140.000 evacuados en la región.

