Familiares de víctimas y sobrevivientes de la represión que el gobierno de Fernando De la Rúa ejerció durante el estallido social que determinó su caída afirman hoy, a 21 años de esos hechos, que "no hubo justicia" para las 38 personas que murieron como consecuencia del accionar de la fuerzas de seguridad el 19 y 20 de diciembre de 2001 en varias ciudades.

"Que nunca más un Gobierno democrático atente contra la población civil", es la idea que engloba los sentimientos de la sobreviviente Susana González; Marta Almirón (madre del joven fallecido Carlos Almirón) y Camila Riva (hija del joven fallecido Gastón Riva).

En ese sentido también se expresó el abogado Rodrigo Borda, que representa a las querellas de las familias de Riva y de Diego Lamagna, asesinado el 20 de diciembre en pleno centro porteño.

"Hoy no hay ningún detenido por la matanza y represión en el estallido social y económico que marcó el fin del modelo neoliberal de los expresidentes Carlos Menem y Fernando de la Rúa", señaló Borda.

Añadió que en la actualidad y "desde diciembre del año pasado, está en la Corte Suprema (pendiente de resolución) la ratificación de las condenas efectivas de Enrique Mathov (ex secretario de Seguridad); y de Rubén Santos (ex jefe de la Policía Federal) que fueron confirmadas por Casación Penal el 13 de diciembre del 2021".

Los jueces Daniel Petrone, Diego Barroetaveña y Ángela Ledesma ratificaron la condena a 4 años y 3 meses de prisión para Mathov, más ocho años y seis meses de inhabilitación para ejercer cargos públicos; y la sentencia de tres años y seis meses para Santos, con siete años de inhabilitación para ejercer como funcionario.

Esto se produjo luego de que las defensas de ambos funcionarios recurrieran a Casación. "Si la Corte lo confirma, Mathov y Santos irán presos porque tienen penas de cumplimiento efectivo", aclaró el abogado.

Mathov y Santos "plantearon la prescripción tres veces pero les fue rechazada", recordó. Borda consideró que "las condenas de Mathov y Santos, quienes estuvieron detenidos un tiempo, al igual que algunos policías como autores materiales, fueron emblemáticas porque fue la primera vez que se condenó a jefes policiales por una represión".

"A De la Rúa lo citaron solo en calidad de testigo cuando debió haber sido condenado ya que se comprobó su responsabilidad en los hechos en los fundamentos de la condena de Mathov", subrayó el abogado.

Susana González, amiga del joven fallecido Alberto Márquez y sobreviviente de la represión, contó que "a 21 años no hubo justicia". "Cuando se trata de cuestiones políticas, como la de la Vicepresidenta (Cristina Kirchner), ahí sacan fallos rápidos", ejemplificó. "Sólo rogamos que nunca más se reprima a la población", dijo en relación a Márquez, su amigo, asesinado en esas protestas.

Marta Almirón, mamá de Carlos Raúl Almirón (23), también aseguró que "no hubo justicia". La mujer contó que su hijo "estaba en tercer año de Sociología e integraba la agrupación de izquierda 29 de Mayo".

"Cuando se iba para el centro le pregunté qué iba a hacer yo si a él le hacían algo, él me respondió: "Hacer justicia". Y es lo que no pude hacer en 21 años", lamentó.

Camila Riva, hija de Gastón Riva, relató a la agencia de noticias Télam que en el 2001 tenía ocho años y aún recuerda el día en que su papá atravesó la puerta de su casa para no volver.

Ese día, Gastón se fue muy temprano a trabajar en la mensajería: era motoquero.

"Al pasar las horas, como no volvía, mi mamá se puso a averiguar. Después vio por televisión cómo la gente ayudaba a cargarlo en una ambulancia, herido. Averiguó a qué hospital lo trasladaron y fue. Pero ya estaba muerto", recordó Camila, que hoy tiene 29 años. Y añadió: "Solo deseo que no le pase a nadie más".


Reparación

El 16 de noviembre pasado, el Senado argentino aprobó por unanimidad y giró a la Cámara de Diputados el proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo por el cual se establece una reparación histórica a las víctimas de la represión y a sus derechohabientes.