Un grupo de especialistas comenzó en Mendoza la tarea de restaurar la Bandera de Los Andes que se exhibe en Casa de Gobierno y que fue bordada en 1817 a pedido del general José de San Martín cuando terminaba la organización del Ejército de los Andes. Desde diciembre de 1992 fue declarada Enseña de la Provincia de Mendoza.

La bandera será objeto “de un trabajo minucioso para llevar adelante las etapas de documentación e identificación, limpieza y consolidación de áreas frágiles”, indicó el Ministerio de Gobierno. “Esta etapa se realizará en un ambiente cerrado con buena iluminación y que permita el resguardo de la histórica bandera, mientras dure el proceso de intervención”, explicó. El paño tiene un metro veinte centímetros de ancho por un metro cuarenta centímetros de largo y cada una de las fajas blancas posee 69 centímetros y 61 centímetros, la celeste.

Entre 1932 y 1935, la bandera fue colocada en un cuadro estuche en el salón Rojo de la entonces Casa de Gobierno, que estaba frente a la plaza Independencia de la capital mendocina. Pero al inaugurarse la Casa de Gobierno en 1951, trasladaron la Bandera de los Andes que permaneció en el cuarto piso, hasta que en diciembre de 1992 fue declarada enseña de la Provincia y se la trasladó al vestíbulo de acceso principal del palacio gubernamental. La Bandera de los Andes tiene una guardia de honor durante las 24 horas, a cargo de cuatro granaderos que pertenecen al Regimiento de Infantería de Montaña 11, de Tupungato.

Retoques

Patricia Lissa, una de las especialistas que participa de las tareas de conservación que finalizarán mañana, explicó: “Tenemos la intención de hacer un buen relevamiento; documentar técnicamente de qué material está hecha; cuál es el tipo de tejido; consolidar los deterioros porque tiene varias roturas y rajaduras en distintos sectores y por último vamos cambiar el sistema de exhibición, ya que actualmente se encuentra sobre un soporte blando lo que dificultaba poder moverla”. “Una vez finalizados los trabajos, la bandera será puesta en un sistema rígido de exhibición que permita que cuando tenga que ser trasladada, no tenga que ser tocado el textil, sino que podrá manipularse a través de una superficie que estará forrada adecuadamente”, añadió.