El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, anunció ayer que enviará efectivos de la Gendarmería Nacional para reforzar la seguridad en la localidad de Wilde, donde los vecinos realizaron anoche la cuarta marcha en reclamo de Justicia por el crimen de la arquitecta y catequista Renata Toscano en la que hubo incidentes con un grupo que pidió "no criminalizar" la pobreza.

Scioli anunció a radio Provincia que el envío de gendarmes fue acordado entre el ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos de la Nación, Julio Alak, y su par de Seguridad bonaerense, Carlos Stornelli. El mandatario provincial dijo entender "la preocupación y la indignación de los vecinos, los que actúan de buena fe y sin especulaciones ni intencionalidad política, porque en ésto muchas veces algunos aprovechan esta circunstancia desgraciada". Y aseguró que en su Gobierno están "abocados a esclarecer" el crimen de Toscano, que hasta ahora no tiene detenidos. Por la tarde, Stornelli, el jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez; el ministro de Gobierno, Eduardo Camaño, y el de Desarrollo Social, Baldomero Alvarez de Olivera, se reunieron con 15 vecinos de Wilde y les transmitieron que el gobernador Scioli recibirá la semana próxima a una comisión para escuchar sus preocupaciones.

Entre los vecinos había familiares de víctimas de hechos delictivos y comerciantes, entre ellos María Denegri, cuyo hijo Leandro fue asesinado en junio de 2003.

Los vecinos marcharon ayer por cuarto día consecutivo y se concentraron frente a la comisaría 5ª de Wilde.