En el marco de la causa que investiga el fiscal de Zárate Campana, Martín Zocca, en relación a los sucesos ocurridos en la casa del músico Chano Moreno Charpentier el pasado 25 de julio cuando recibió un disparo en el abdomen de parte del efectivo Facundo Amendolara, comienzan a realizarse diversas pericias.

La primera parte se realizará en el Instituto de Ciencias Forenses de Lomas de Zamora y estarán presentes tanto los peritos oficiales de la Policía Federal Argentina como los de parte. Con esto se busca verificar si efectivamente el disparo salió del arma del efectivo de la bonaerense imputado en el expediente por el delito de lesiones gravísimas agravadas por el uso de arma de fuego y tratarse de un funcionario policial. 

Uno de los aspectos clave en esta instancia de la pericia tiene que ver con la deflagración o huella de pólvora hallada en la ropa de Chano; para ello se realizarán disparos con la misma arma sobre prendas similares a distintas distancias a fin de determinar cuán próximo estaba el policía Amendolara del cantante.

La segunda parte de la prueba pericial se centrará en el ADN de la remera que llevaba puesta Chano al momento del disparo. De hallarse más de una muestra en la prenda se cotejará con el de las personas que estaban la casa de Exaltación de la Cruz para comprobar si hubo algún contacto físico o forcejeo previo al incidente, este estudio se realizará durante la semana próxima.

Finalmente, las cámaras de seguridad. El próximo 17 de agosto la Unidad de Análisis e Investigación Digital de la Dirección General de la Policía Judicial de La Plata, realizará este tercer estudio para determinar si los dispositivos de registro de seguridad de la casa de Chano en el barrio privado “Parque La Verdad” funcionaban correctamente la noche del 25 de julio.

Otro apartado que será de importante análisis para la justicia tiene que ver con el objeto que tenía el músico Chano en su mano al momento del episodio de descontrol psicomotriz, con el cual el oficial Amendolara se sintió amenazado y que forzó a desenfundar su arma. Los primeros testimonios dan cuenta que se trataba de un cuchillo de cortar pan, pero la declaración de varios familiares apuntan a que era una caña que agarró de un cantero y que su estado no era violento.

En tanto, las testimoniales seguirán su curso. Aún restan declarar el enfermero y médica clínica de la empresa Más Vida, el médico a cargo de la ambulancia que trasladó a Chano al Sanatorio Otamendi, y un vecino del barrio que manifestó verlo "perdido en tiempo y espacio". Además la fiscalía debe resolver si hace lugar al pedido del abogado Fernando Soto, defensor de Amendolara, de someter al cantante a una pericia psiquiátrica.

Mientras todo esto ocurre, el cantante evoluciona favorablemente en el sanatorio Otamendi donde fue intervenido el pasado 26 de Julio y podrían darle el alta en los próximos días.