Con casi 80% del área de búsqueda ya rastrillada, nada se sabe sobre el destino del submarino ARA San Juan, cuyo último contacto de radio se dio el pasado miércoles, cuando avanzaba hacia esta ciudad a la altura de Puerto Madryn y sin que reportara problemas de navegación.

El comandante del Área Naval Atlántica y jefe de la Base Naval Mar del Plata, almirante Gabriel González, aseguró esta mañana que la Armada Argentina puso a disposición sus propios medios, a los que se han sumado buques pesqueros y también aeronaves estadounidenses, además de la posible participación de un buque de investigación del Reino Unido, que opera en Islas Malvinas y fue ofrecido para sumarse al operativo.

Casi medio centenar de familiares pasó esta mañana por la unidad militar de Playa Grande, apostadero natural del ARA San Juan, a la espera de novedades de un rastrillaje que comenzó hace más de 36 horas y no ha aportado ni una sola pista que permita precisar dónde está el submarino.

Cómo es la búsqueda

Un Sold 2 Tango Tracker y un B 200 de la Aviación Naval, un C 130 de la Fuerza Aérea y un P3 Bravo de la NASA y un P8 de la US Navy cubren por aire la zona de 300 kilómetros de diámetro que se estableció como posible derrotero del ARA San Juan. Del barrido en superficie participan el destructor ARA Sarandí, las corbetas ARA Rosales y ARA Drumond y, ya en camino hacia la zona de operaciones, se sumarán entre esta noche y el lunes los buques oceanográficos ARA Austral y ARA Puerto Deseado, con equipamiento de sondas para la búsqueda en profundidades. Antes llegarán los avisos ARA Puerto Belgrano y ARA Islas Malvinas más las corbetas ARA Espora y ARA Granville y el transporte ARA San Blas.