El presidente Alberto Fernández concentró su agenda en la intimidad de Olivos, en sintonía con la directiva para que la administración pública atienda de manera remota por el pico de contagios. Sin embargo, la Casa Rosada fue escenario de una reunión de alto volumen político entre oficialistas y opositores de la Provincia, principal distrito electoral del país.
En el salón de los Escudos del ministerio del Interior, el anfitrión y ministro político, Eduardo "Wado" de Pedro, recibió a los principales referentes de la política bonaerense del peronismo y del PRO. El objetivo principal fue uno solo: avanzar en el plan oficial para postergar las elecciones. No solo de las PASO; sino también de las generales. Los principales referentes de la oposición ya dieron el sí, pero quieren fijar criterios objetivos que justifiquen el corrimiento. La idea es mover las primarias de agosto a septiembre y las definitivas generales de octubre a noviembre.
La próxima semana habría una reunión entre el ministro del Interior y los jefes de los interbloques para avanzar en una ley que modifique el calendario electoral.
La Provincia, principal distrito electoral, acompañará la decisión nacional. Se plegará al calendario por decreto; sin necesidad de una ley en la Legislatura. Así lo expuso el gobernador Axel Kicillof, presente durante el encuentro en la Rosada.
Acompañaron a de Pedro, además del mandatario bonaerense el jefe de bloque de Diputados del FDT y presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner; y el titular de la Cámara Baja, Sergio Massa. También dijo presente el ministro de Obras, Gabriel Katopodis, uno de los dos representantes de los alcaldes provinciales peronistas en el Gabinete.
Entre los intendentes se contaron oficialistas de peso, como el lomense Martín Insaurralde y la quilmeña Mayra Mendoza, entre otros. Entre los opositores sobresalió Jorge Macri, que en las últimas semanas levantó el tono contra el Presidente. El intendente de Vicente Lopez, que quiere competir por la candidatura a gobernador en 2023 y no descarta ser candidato este año, tiene influencia en el Senado bonaerense, donde hay mayoría opositora, y es un primus inter pares entre los intendentes de su partido. Los alcaldes del PRO en el GBA -el Grupo Dorrego- se habían mostrado con Mauricio Macri por la mañana.
Además dijo presente el jefe de bloque del PRO en Diputados, Cristian Ritondo, principal delegado de la ex gobernadora María Eugenia Vidal y del jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta en el Congreso. En la Ciudad negaron contactos sobre la posibilidad de postergar el calendario electoral, pero no descartan la posibilidad en el medio del alza de casos de coronavirus.
El ala moderada del PRO cree que los halcones del macrismo deberán plegarse al consenso mayoritario del partido por racionalidad y coherencia, por el alza de contagios y porque hay proyectos de JxC en el Congreso para correr el calendario electoral.
El alza de casos de Covid-19 y la circulación de nuevas cepas relajó las relaciones entre el Ejecutivo nacional y la Ciudad. En el encuentro de este martes en Rosada hubo buena onda y chicanas, según relataron algunos de los presentes. "Tenemos que fijar criterios con respecto a las PASO, suspenderlas no es una opción", dijo a Clarín. En la oposición no creen que el oficialismo obtenga un rédito electoral con la flexibilización del calendario.
Massa había abordado la posibilidad de postergar las primarias nacionales con el Presidente en un encuentro a solas. Fernández dio la orden a los gobernadores del Norte de inmiscuirse en las negociaciones en el Congreso si esa era su voluntad. Dilatar el calendario electoral no tendría sentido si no ocurriera lo mismo en el distrito más populoso del país.
La excusa formal para la convocatoria fue la firma del Programa de Emergencia de Infraestructura Municipal de la Provincia de Buenos Aires (PREIMBA), cuya puesta en marcha se oficializó en el Boletín Oficial Se trata de la transferencia de fondos para obras por $5 mil millones de Nación a la Provincia y de allí a los municipios, informaron en Interior, a cargo de la reunión.
El proyecto de ley original llevaba la firma de Ritondo, pero fue consensuada con Máximo Kirchner. Con despachos cercanos, en el mismo piso del Congreso, jefe del bloque del PRO y el líder de La Cámpora construyeron una relación de confianza, que crece día a día.
Fuente: Clarín

