Los bonos argentinos sufrieron pérdidas ayer, tras el comunicado del Fondo Monetario Internacional (FMI) que instó a los acreedores a aceptar una quita en la negociación de la deuda. Los títulos públicos registraron caídas de hasta 2% mientras que el riesgo país subió 2,7% y superó los 2100 puntos.

Los bonos en dólares fueron los más afectados. El Bonar 2037 llegó a caer casi 2%. Ese retroceso general de los activos argentinos puso presión sobre el riesgo país, que trepó hasta 2.108 unidades.

En contraste, las acciones de empresas argentinas, tanto en Buenos Aires como en Wall Street, anotaron subas. El Merval tuvo un incremento promedio de 1,5%, con Supervielle liderando el avance (5%). En Nueva York, en tanto, los papeles de compañías nacionales llegaron a repuntar hasta 4%, como el caso de Cresud.

Según operadores, la baja de los bonos soberanos en dólares son retrocesos más moderados de lo que se preveía de antemano. Previsiblemente, los títulos argentinos operaron en terreno negativo desde el inicio de la jornada, con bajas lideradas por el Bonar 2024, que cedió 2,2%; el Bonar 2037, que perdió 2%, al igual que el Bonar 2020, para profundizar las mermas acumuladas en el año.

"Hubo una previsible debilidad de los bonos tras la dura declaración del FMI (del miércoles pasado) que anticiparía mayores quitas para los bonistas. Si bien era esperable una reacción negativa, es cierto que podría haber sido peor", comentó a Ámbito Financiero el economista Gustavo Ber.

El presidente Alberto Fernández destacó ayer que el Fondo Monetario Internacional (FMI) "nos dio la razón" y "por primera vez en su historia hace semejante reconocimiento", luego de que el organismo internacional admitiera que la deuda pública argentina "no es sostenible".

"Hoy nos despertamos todos con que el que nos dio la razón es el FMI y que no era mentira lo que decíamos. Por primera vez en la historia el Fondo hace semejante reconocimiento", dijo Fernández al participar ayer mediodía de la inauguración de una planta productora de medicamentos biológicos de la empresa mAbxience en Garín, partido bonaerense de Escobar.

El miércoles, al finalizar la misión técnica del organismo para la revisión de las cuentas públicas del Estado argentino, el FMI aseguró que la deuda pública argentina "no es sostenible", que el superávit fiscal necesario para enfrentar su pago "no es económica ni políticamente factible" y reclamó una "apreciable" quita a los acreedores privados.

"Nos acusaban de populistas pero resulta que hoy nos despertamos todos con que el que nos dio la razón es el FMI", consideró el Presidente, según reprodujo la agencia de noticias Télam.