El Tribunal en lo Criminal 3 de Jujuy concedió ayer el traslado de Milagro Sala a su domicilio del barrio Cuyaya, en la capital provincial, donde seguirá cumpliendo prisión preventiva con pulsera electrónica, según lo solicitaron los abogados de la dirigente.

La disposición incluye el quite de "restricciones" que se habían impuesto en su domicilio de la localidad de El Carmen, dando efectivo cumplimiento a la prisión domiciliaria dispuesta por la Corte Interamericana de Derechos Humanos y la Suprema Corte de Justicia de la Nación, indicaron allegados a Sala.

La líder de la Tupac Amaru cumplirá el próximo 16 de enero tres años con prisión preventiva por diversas causas, fecha que marcará el límite fijado por ley para estar detenida sin condena. Ya en su casa de calle Gordaliza, en San Salvador de Jujuy, Sala aseguró emocionada que el cambio de domicilio constituye para ella "una pequeña luz para comenzar a creer en la Justicia".

Aseguró que tanto en la causa por el supuesto desvío de fondos públicos como en la que fue absuelta el jueves último, los que declararon contra ella lo hacen condicionados por supuestas "amenazas".

En la orden del traslado al domicilio de la capital jujeña, donde Sala pidió estar desde un primer momento, el Tribunal dispuso que "deberá cumplir con la obligación de permanecer allí, no pudiendo movilizarse fuera del mismo", con excepción para concurrir a lugares previamente autorizados.

Allegados a la dirigente destacaron el hecho de que Sala haya sido liberada "del alambrado rodeando su inmueble, de cámaras de seguridad"; de la disposición en El Carmen de un "destacamento de Gendarmería y de policías", alejado de lo que "establece el Código Procesal Penal, que prohíbe que fuerzas de seguridad custodien a las personas con prisión domiciliaria".