Después de casi cinco meses de incertidumbre, la empresa minera brasileña Vale reveló ayer que busca ‘comprador’ para Potasio Río Colorado en Mendoza, con lo que confirmó su retiro del proyecto minero al cual apostaba todas sus fichas el Gobierno de Mendoza. Ante este anuncio, el gobernador, Francisco ‘Paco’ Pérez adelantó que buscará socios y consideró que el gobierno nacional y todos aquellos que se quieran sumar al rediseño del emprendimiento se tienen que “arremangar” para redireccionar el proyecto’.
Durante una audiencia pública en la Comisión de Minería del Senado, Vale, a través del asesor de la empresa, Adolfo Duragnona, confirmó su retiro de Mendoza, aunque aclaro que tiene previsto ‘mantener todos los activos” y cumplir con las obligaciones que establece el Código de Minería.
Duragnona leyó una carta formal de la minera donde indicó que se ‘buscó socios‘ para seguir con el proyecto pero no se obtuvieron resultados favorables hasta el momento, aunque garantizó que se ‘seguirá buscando‘ interesados. A su vez, el vocero afirmó que en forma directa la empresa sólo tiene 400 empleados con quienes ‘se cumplirá con la ley, se pagarán las indemnizaciones correspondientes‘.
Respecto a los contratistas indicó que ‘se está pagando a los contratistas los montos que corresponde de acuerdo a los contratos‘ y las deudas a los proveedores ‘están siendo canceladas normalmente‘.
La medida de la empresa ocasiona un grave perjuicio para Mendoza y también para Neuquén, Río Negro, La Pampa y la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, involucrados en el trazado del proyecto.
En la audiencia pública realizada en el Salón Azul presidida por el senador neuquino Horacio Lores (MPN), titular de la comisión de Minería, la empresa brasileña atribuyó la suspensión del emprendimiento a que se duplicó la inversión prevista de 6 mil millones de dólares debido a pedidos de obras adicionales formulados “por los gobiernos provinciales” afectados en el trazado del proyecto.
Duragnona fue el vocero de Vale en la audiencia pero también asistieron los directores ejecutivos Galib Chaim y Roger Downey y los asesores Ademar Barros Moura Filho, Claudio Arenas y Humberto Pinheiro.
El vocero de la empresa dijo que en reuniones técnicas celebradas con autoridades argentinas para discutir el aumento de la inversión exigida el monto solo había bajado a 11 mil millones de dólares, igual estaba muy por encima de lo presupuestado.
El secretario de Minería de la Nación, Jorge Mayoral denunció “inexactitudes” y “falsedades” argumentales de la empresa y precisó que en las tratativas se “convinieron 8.660 millones de dólares” de inversión para el proyecto.
El funcionario atribuyó a un mal negocio con la venta de hierro a nivel global de la empresa la decisión tomada de suspender Potasio Río Colorado en la Argentina, así como lo hizo con otros proyectos en el mundo.
Duragnona, luego, volvió a remitirse a la carta leída al inicio pero admitió que “por pedidos de las provincias los costos habían aumentado 1,500 millones” de dólares y “el resto se debía a otras circunstancias” que no especificó. Por su parte, el gobernador de Mendoza, Francisco Pérez, hizo una cronología de la situación que desembocó en el abandono del proyecto por parte del Vale y manifestó que es “de una incertidumbre muy grande la situación que se vive en la provincia” con la pérdida de miles de puestos de trabajo.
Pérez precisó que el lunes próximo inicia una misión comercial en la India y luego visitará Shangai y Beijing, en China, “donde ya tenemos concertadas cuatro audiencias con interesados sobre este proyecto”.