El Tribunal Oral en lo Federal Criminal 2 autorizó en la tarde de ayer a la expresidenta Cristina Kirchner el uso del balcón en el domicilio de San José 1111 donde cumple prisión domiciliaria por la causa Vialidad pero la alegría por esta medida duró poco ya que poco después personal de la Dirección de Asistencia de Personas Bajo Vigilancia Electrónica le puso la tobillera que deberá utilizar para vigilar sus movimientos.
Después de las 18, personal de la Dirección a cargo del sistema de monitoreo, le colocó a Cristina Kirchner la tobillera electrónica. Desde ese preciso instante, comenzó a estar supervisada por el área que depende del Ministerio de Seguridad de la Nación que conduce Patricia Bullrich.
En su resolución el TOF 2 mandó un oficio a la Dirección de Asistencia de Personas bajo Vigilancia Electrónica en el que pidió que “se dé cumplimiento con lo ordenado por este tribunal el pasado 17 de junio y, en consecuencia, proceda a la colocación de un dispositivo de vigilancia electrónico respecto de Cristina Elisabet Fernández de Kirchner, en el domicilio oportunamente informado a ese organismo”.
Por eso, los técnicos que fueron al departamento de la expresidenta por la mañana tomaron las medidas y dimensiones del departamento de San José 1111 para poner los dispositivos que detectarán si CFK sale del edificio. Por la tarde, le pusieron la tobillera.
En cuanto al uso del balcón, en la resolución, los jueces Jorge Gorini y Rodrigo Giménez Uriburu sostuvieron que “el tribunal no ha vedado el uso y goce de ningún espacio específico de la arquitectura del inmueble en el que habita”, pero aclararon que “se espera de la solicitante el criterio, la prudencia y el sentido común suficientes para discernir en qué contexto el uso del balcón resultará una acción inocua y en cuál podrá implicar una perturbación para la tranquilidad y la convivencia pacífica del vecindario”.

