A casi un mes de que Marcela Acuña fuera condenada por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, la jueza de la Cámara del Crimen N° 2 de Chaco, Dolly Fernández, ordenó que la dirigente política perdiera todos los tratos especiales que se le otorgaron durante la etapa del juicio oral.

La medida se dio a conocer este sábado, después de que la magistrada dispusiera que la condenada debe comenzar a cumplir con un régimen de detención común. Esto implicará que la ex candidata a intendente de Resistencia pase a ser considerada igual al resto de las reclusas.

Previo a esto, Acuña había tenido el privilegio de ser trasladada hacia un pabellón común, en donde tenía acceso a ciertas actividades que no estarían disponibles para todas las personas que ya hubieran sido condenadas. Asimismo, la jueza pidió al personal del Servicio Penitenciario que garantice el cuidado de la detenida.

De acuerdo con la información publicada por Diario Chaco, Fernández hizo especial hincapié en que se cumplan las “condiciones de seguridad, trato digno y resguardo físico, psíquico y emocional”. Y fundamentó la decisión al explicar que el habeas corpus correctivo busca asegurar condiciones humanas de detención, pero no brindar privilegios.

Previo a esto, la jueza estuvo a cargo de valorar las responsabilidades penales de los acusados en el crimen ocurrido en junio de 2023. No obstante, todavía faltaría definirse la cantidad de años que cada uno de los seis condenados deberá pasar tras las rejas.

En el caso de César Sena, el jurado popular consideró que fue el autor material del femicidio de Cecilia, tras probarse que la asesinó en la casa de sus padres. Al consumar el crimen, la envolvió en una manta y la había dejado escondida en otra habitación. Tanto la Fiscalía, como la querella habían solicitado la prisión perpetua.

Sobre el rol de Marcela Acuña y Emerenciano Sena, la jueza definió que habían sido partícipes necesarios para la comisión del delito. Mientras que para Gustavo Obregón, Fabiana González y Gustavo Melgarejo, sus empleados que fueron encontrados responsables de encubrimiento, pidieron penas menores.

Después de que concluyeran las audiencias de cesura, la jueza Fernández cuenta con un plazo de quince días hábiles para dictar sentencia, aunque la inminente feria judicial, que se extiende del 24 de diciembre al 31 de enero, podría demorar la resolución hasta el año próximo.

César Sena sostuvo: “Quiero adherir en todo lo que ha expresado mi defensa, como así también hacer reserva de todos los recursos pertinente de casación. Como único pedido que puedo realizar, que no se me mueva de mi lugar actual de alojamiento por cuestiones sencillas, como que tengo a toda mi familia radicada en la ciudad presente. Y es todo lo que tengo para decir”.

Emerenciano Sena participó de la audiencia junto a su hijo a través de Zoom e insistió: “No me muevan de aquí, que este es el alojamiento más cercano a mis familiares, amigos, conocidos. No tengo familiares en otro lugar, y son los únicos que me traen mis medicamentos, que no son todos los que necesito, pero por lo menos me ayudan a mantener mi vida por ahora”. Asimismo, remarcó: “Solicito eso, trasladarme a cualquier otro lugar sería una pena de muerte. Y no se olviden que yo soy un inocente condenado”.

Por su parte, Marcela Acuña realizó una exposición extensa en la que pidió a la jueza que considere la situación de su esposo, tras argumentar que fue condenado sin pruebas contundentes. Además, apuntó que “se le dio un jurado no técnico que determinaron hechos con pruebas que creo que ningún estudiante de abogacía puede llegar a tenerlas como válidas”.