La necesidad de caja por la caída de la recaudación y la “motosierra” del gobierno de Javier Milei, sirvió como aglutinador de los gobernadores provinciales, entre ellos al sanjuanino Marcelo Orrego, que ayer pisaron el acelerador y resolvieron presentar un proyecto de ley para asegurarse más fondos. En el encuentro en la sede alternativa del CFI, en el que participaron 22 de 24 caciques provinciales, acordaron impulsar un proyecto de ley para que se distribuyan las partidas de ATN no transferidas y quedarse con el dinero que va a los fondos fiduciarios para obras de infraestructura e hídricas que se financia con el impuesto a los combustibles.
Frente a esta embestida de los gobernadores, desde el Poder Ejecutivo rechazaron el pedido y reclamaron que se avance en la aprobación de la ley de “Reparación de los Ahorros” lo cual entienden que dinamizará la economía y generará nuevos recursos. Y sobre la iniciativa para llevar el reclamo al Congreso a través de un proyecto de ley, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ya anticipó que “el Presidente vetará cualquier iniciativa que comprometa el superávit fiscal”.
Con la presencia del cordobés Martín Llaryora y el bonaerense, Axel Kicillof, los mandatarios provinciales no atendieron los reclamos de la Casa Rosada de esperar hasta mitad de esta semana para la formulación de una propuesta más concreta.
Los gobernadores también se adelantaron a la reunión del Consejo de Mayo que hoy arrancará con las reuniones con todos los sectores de la economía y los sindicatos y que, entre la agenda de temas se encuentra una reforma de la coparticipación federal.
A la reunión en el CFI, los representantes de la Casa Rosada llevaron una propuesta, de la que no trascendieron detalles, pero que sin dudas no conformó a los gobernadores que contraatacaron con un proyecto de ley que apunta a recuperar fondos de Nación.
La iniciativa se divide en dos tramos. Por un lado, la distribución en la misma proporción en que lo dicta la coparticipación de los fondos remanentes de ATN; y por el otro, el reparto de los fondos fiduciarios que se fondean con una parte del impuesto a los combustibles destinados a planes de infraestructura para el transporte y obras hídricas.
Según datos que proporcionó la consultora Politikon Chaco, en 2024 el fondo de ATN que se forma con el 1% de la masa coparticipable de recaudación- alcanzó a $680.000 millones, de los cuales solo fueron distribuidos $49.800 millones, quedando un remanente de $630.000 millones. Cabe recordar que, de acuerdo a la ley, los ATN están para atender “emergencia o desequilibrios financieros temporales” de las provincias.
En lo que va de 2025, el fondo de ATN tiene acumulados $365.809 millones, de los cuales se distribuyeron
$80.500 millones, quedando $285.309 millones para otorgar. A eso apuntan las provincias.
Por su parte, el impuesto a los combustibles líquidos que es el que aporta a la masa coparticipable, se estima que ya recaudó $ 1,5 billones, de los cuales poco más de $ 500.000 millones están imputados al Fondo Fiduciario de Infraestructura del Transporte y al Fondo Fiduciario de Infraestructura Hídrica, ambos creados en 2001, y que ahora se pretenden eliminar. Lo concreto es que el recorte de esos gastos que sufren las provincias forma parte del superávit fiscal que mes a mes alcanza el gobierno nacional.

